El local abrió con licencia de suelo habitacional
Alcaldía avaló en diciembre remodelación del local // Hay denuncia en la FGJ
Jueves 29 de septiembre de 2022, p. 30
El Registro Público de la Propiedad y el Comercio informó que Grupo Don Eraki Sociedad Anónima de Capital Variable quedó inscrito el 3 de septiembre de 2002 bajo el folio mercantil 293511, con un capital mínimo fijo de 50 mil pesos y una duración indefinida.
Su objeto es explotar, comercializar, promover, adquirir, vender, traspasar, administrar y supervisar todo tipo de franquicias, en el que esa sociedad celebra todos los actos y contratos necesarios o convenientes a los anteriores fines.
Los accionistas son Daniel Tabe Tabe, Rosa Evangelina Echartea Valle, Daniel Tabe Echartea, Aldo Tabe Valle y Mauricio Tabe Echartea, alcalde de Miguel Hidalgo, cada uno con una participación de 20 por ciento.
El grupo es propietario de la taquería de la calle Progreso 172, colonia Escandón, que abrió el pasado 18 de agosto en un predio que cuenta con uso de suelo habitacional.
En el certificado de zonificación emitido por la Secretaría de Desarrollo Urbano y Vivienda se precisa que es H5/30, es decir, de uso habitacional con cinco niveles como máximo de construcción y 30 por ciento mínimo de área libre.
Sin embargo, la Dirección Ejecutiva de Registros y Autorizaciones de la alcaldía Miguel Hidalgo autorizó en diciembre pasado que se llevarán a cabo trabajos de mantenimiento y/o reparaciones menores.
Ocho meses después abrió la taquería, cuyas actividades fueron suspendidas el pasado martes por personal del Instituto de Verificación Administrativa (Invea) luego de que sus encargados no exhibieron la documentación necesaria para su funcionamiento legal.
Daniel Tabe, padre del alcalde, amagó con un cuchillo pastorero a un verificador de la dependencia, quien lo denunció ante la Fiscalía General de Justicia (FGJ), que integra la indagatoria y establece el delito que se configure conforme a la ley.
Un día después de los hechos, la taquería Don Eraki se mantiene sin servicio al público y con los dos sellos de suspensión de actividades colocados por el Invea; sólo se ve a dos trabajadores, uno en el área de remisión de notas y otro que hace reportes vía telefónica.
Transeúntes detienen su paso para grabar videos o tomar fotografías del negocio donde antes había una bodega de computadoras y años atrás era una fábrica de galletas, recordó Francisco Escalante, residente de la colonia. Consideró que lo ocurrido el martes puede ser parte de una revancha política
, aunque el padre del alcalde reaccionó desproporcionadamente
.
Unos jóvenes que trabajan en las inmediaciones comentaron que el señor es del tipo de personas con un tipo de comportamiento algo pesado
.