Ibiza. Un dibujo atribuido a Pablo Picasso con un valor estimado de 450 mil euros fue confiscado a principios de julio en el aeropuerto de Ibiza, en las islas Baleares, a un viajero sospechoso de contrabando, informó el lunes la Agencia Tributaria española.

Autoridades en materia de Patrimonio Cultural y Bellas Artes han considerado, de forma preliminar por la falta de informes más exhaustivos, que la obra atribuida a Picasso, interceptada en el Aeropuerto de Ibiza, es original y, por lo tanto, el precio facturado por una galería suiza se ajusta al precio de mercado.

Según comunicó ayer el Ministerio de Hacienda y Función Pública, tras la intervención de la obra se realizaron gestiones con la Dirección General de Patrimonio Cultural y Bellas Artes del Ministerio de Cultura, que se puso en contacto con la directora del Museo de Arte Contemporáneo de Ibiza, informando positivamente, aunque con cautela, sobre la originalidad de la pieza, así como su valor de mercado.

Para la acreditación definitiva se requerirán informes más completos que deberán realizar especialistas en la obra de Picasso mediante técnicas avanzadas.

Funcionarios de Aduanas de la Agencia Tributaria y agentes de la Guardia Civil, en el marco de una operación conjunta, aseguraron el pasado 5 de julio un dibujo atribuido a Pablo Picasso. La obra, Trois personnages (1966), se encontraba en el equipaje de un viajero procedente de Suiza que intentaba introducir el cuadro en España sin declarar.

Portación sospechosa

Según el Ministerio de Hacienda y Función Pública, la actuación tuvo su origen en una información remitida por la Aduana de Suiza al Centro de Coordinación Operativa Permanente del Departamento de Aduanas de la Agencia Tributaria sobre un viajero que, con origen en el país helvético, se encontraba en vuelo comercial Zúrich-Ibiza portando una obra de arte en circunstancias que las autoridades suizas estimaron sospechosas.

Tras estas informaciones, se dispuso un operativo formado por funcionarios de Aduanas de la Agencia Tributaria y agentes de Guardia Civil para confiscar la obra, en caso de que el viajero intentara introducirla sin declaración, sustrayéndola así al control de las autoridades aduaneras españolas.

A su llegada al Aeropuerto de Ibiza, el viajero negó que tuviera algo que declarar. De inmediato, se procedió a la comprobación de su equipaje y se encontró en el interior una obra de arte con firma de Picasso. El viajero alegó que se trataba de una copia y mostró una factura manuscrita de mil 500 francos suizos.

Sin embargo, al hacer un registro en profundidad de su equipaje se halló una segunda factura, en esta ocasión de una galería de arte de Zúrich por un valor de 450 mil francos suizos, en cuyo concepto aparece el título de la obra Trois personnages de 1966.

Las autoridades aduaneras procedieron a la intervención de la lámina por un presunto delito de contrabando al haberse introducido sin declarar desde Suiza una obra de arte cuyo valor superaría los límites legales establecidos de 150 mil euros.

Entrar con la obra de manera lícita a España habría implicado el pago por los derechos arancelarios y el impuesto al valor agregado a la importación, además de las obligaciones de declaración administrativa a las que estuviera sujeta la mercancía.

La obra de arte se encuentra a disposición del Juzgado de Instrucción 4 de Ibiza, que se encarga de la investigación de los hechos.