La esperada visita del Celta de Vigo a los Pumas de la UNAM terminó con un empate 1-1.

El amistoso, el primero en la agenda del club español en su gira por América, dio comienzo bajo una intensa lluvia que disminuyó sólo un poco en el concurrido estadio Olímpico Universitario, donde el cuadro español saltó a la cancha con uniformes genéricos negros que de última hora les proporcionó una firma deportiva, ya que su equipamiento no llegó junto con el plantel, la noche del martes, y no pudo ser recuperado.

El arquero visitante Rubén Blanco se lució desde el tercer minuto de juego con una muy buena atajada a un remate picado de cabeza del brasileño Diogo de Oliveira.

Iago Aspas, el 10 y mayor atracción del cuadro gallego, estuvo cerca de abrir el marcador a los 17 minutos, pero en su ingreso al área no aprovechó la distracción en la zaga felina y falló el remate.

El gol cayó a los 21 en una jugada a balón parado, con un cobro impecable de Leonardo López desde la derecha directo al área, que De Oliveira conectó con la testa luego de un gran salto.

Los visitantes buscaban emparejar, pero la defensiva universitaria, bien asentada, no regaló espacios, lo que desataba el festejo entre los aficionados empapados.

Parecía que los Pumas se irían al descanso con la ventaja, pero poco antes del silbatazo se produjo una jugada parecida en su contra, cuando Solari metió el servicio y con la mala marca de la parte baja de Pumas llegó el remate de Aspas, que de cabeza empató el marcador.

El cotejo no perdió ritmo en el complemento, pero los intentos de ambos lados se diluyeron. Pumas acumuló llegadas con pifias, con una colección de tres de Juan Dinenno.Primero a los 72 minutos, frente al área, el atacante argentino remató de media vuelta y el guardameta del Celta se estiró para evitar el gol de la ventaja universitaria. A los 79 falló un disparo de pierna izquierda en una jugada clara de gol, y a los 86 de nuevo erró con la testa.

Fue la primera visita del Celta de Vigo a México y de un equipo europeo a la cancha de Ciudad Universitaria desde que Pumas fue anfitrión del Osasuna en 2003, encuentro que igualmente concluyó empatado a uno.

Horas antes del partido, los equipos ofrecieron una conferencia conjunta en un hotel cercano al estadio, que propició un rencuentro entre los entrenadores argentinos, Andrés Lillini, de los Pumas, y Eduardo Coudet. Recordaron la amistad que iniciaron hace una década ya como técnicos, respectivamente del CSKA de Moscú y del Rosario Central.