En las decisiones políticas y económicas, la mayoría de las que regulan la vida, se ignoran los valores de la naturaleza o se toma una pequeñísima fracción de ella, indica la evaluación de los valores de la Plataforma Intergubernamental Científico-Normativa sobre Diversidad Biológica y Servicios de los Ecosistemas (IPBES). En el motor de muchos factores de insustentabilidad se ha privilegiado el beneficio económico de corto plazo.

En entrevista, Patricia Balvanera Levy, del Instituto de Investigaciones en Ecosistemas y Sustentabilidad de la UNAM, y una de las cuatro presidentes de evaluación del organismo internacional, apunta que el paradigma del bienestar es el crecimiento económico y por esto es que llega a transformarse la selva lacandona en plantaciones de palma de aceite y otras en pastizales, se tiene sólo esta visión de la naturaleza.

Ejemplifica que si tenemos un río y lo valoramos por la cantidad de peces, únicamente se enfatiza el precio del mercado del precio del pescado, sólo el valor comercial, falta valorar de dónde viene el río, el bosque, la lluvia, considerarlos como nuestra casa y más factores. Agrega que los valores involucrados tienen que ver con considerar que somos parte de la naturaleza.

Otro mensaje del reporte es que los valores que tienen las personas de la naturaleza varían mucho, en el caso de México, por ejemplo, en el norte hay bosques templados, desiertos, playas; en el centro, volcanes; en el sureste, selvas. Hay grupos humanos diferentes. La cultura del norte es distinta a la del centro. Las personas valoran la naturaleza de manera diferente. Cuando no se toma en cuenta la diversidad de valores hay conflictos socioambientales y pérdida de biodiversidad. La solución es que necesitamos entender la diversidad de visiones.

Existe un enfoque global dominante de ver los beneficios a corto plazo y el crecimiento económico, a menudo excluyendo la consideración de múltiples valores de la naturaleza en las decisiones políticas. Al analizar posibles escenarios futuros, se encontró que el decrecimiento, los guardianes de la naturaleza, el crecimiento verde y la conservación de la naturaleza está sustentado en valores comunes, en justicia intergeneracional, y llevaría a mantenernos en los límites que el planeta permite.

Mapeo de la biodiversidad

El reporte también indica que mapear la biodiversidad y ver la forma de transformar de manera profunda las sociedades para tener una visión más positiva, futuros más justos y sostenibles, tiene que ver con que los procesos de toma de decisión se deben abrir para dar cabida a todos los procesos. IPBES presentó en el noveno periodo de sesiones del plenario que concluyó el 9 de julio esta evaluación, realizada durante cuatro años por 82 expertos de 47 países.