Jerome Powell, presidente de la Reserva Federal (Fed) de Estados Unidos, destacó ayer el fuerte crecimiento y la solidez del mercado laboral estadunidense, pero, por primera vez, reflejó sus dudas sobre la capacidad de la autoridad monetaria de estabilizar la inflación sin provocar una recesión, al hablar ayer en una reunión de jefes de bancos centrales en Lisboa, Portugal.

En ese marco, el Departamento de Comercio de Estados Unidos revelaba ayer que la economía de ese país se contrajo más de lo estimado durante el primer trimestre del año.

En su intervención en el foro de bancos centrales organizado en Sintra (Portugal), Powell indicó: creemos que podemos mantener el empleo fuerte y devolver la inflación al objetivo, pero es una tarea cada vez más difícil. Y ya era difícil.

El presidente del banco central estadunidense ve necesario seguir endureciendo la política monetaria para moderar el crecimiento de Estados Unidos y reconducir la inflación. Ello significa que seguirá el alza en las tasas de interés, como se ha anticipado.

En tanto, la tercera estimación del Departamento de Comercio reveló que el producto interno bruto (PIB) cayó 1.6 por ciento a una tasa anualizada en los primeros tres meses de 2022, revisado a la baja desde el retroceso de 1.5 por ciento, informado en mayo.

Ante la expectativa de un menor crecimiento económico en Estados Unidos, México se vería afectado por una caída en las exportaciones y el flujo de remesas, principalmente, de ahí que los mercados financieros en México cerraron mixtos.

El peso mexicano se apreció un marginal 0.09 por ciento, para cerrar en 20.1240 unidades por dólar spot. De acuerdo con el Banco de México (BdeM), la paridad peso-dólar operó en el mercado intercambiario entre un máximo de 20.2110 unidades y un mínimo de 20.1000 unidades.

En tanto, el dólar mantiene su racha ganadora, al apreciarse 0.56 por ciento, de acuerdo con su índice DXY, a 104.840 unidades.

Mientras, la Bolsa Mexicana de Valores, a través del Índice de Precios y Cotizaciones (IPC), retrocedió 0.77 por ciento, a 48 mil 61.61 puntos.

Wall Street, tras el pinchazo de ayer de 2 por ciento en el S&P 500, no pudo lograr un rebote completo, luego del dato definitivo del PIB de Estados Unidos.

El Nasdaq cayó 0.03 por ciento, a 11 mil 177.89 puntos; el Dow Jones avanzó 0.27 por ciento, a 31 mil 29.31 enteros y el S&P 500 perdió 0.07 por ciento y cerró en 3 mil 818.83 puntos.

Las dudas económicas volvieron a primer plano, y el precio del barril Brent cayó, 2.14 por ciento, a 115.45 dólares; el WTI cedió 2.17 por ciento, a 109.39 dólares. La mezcla mexicana cerró en 107.35 dólares por barril.

A diferencia del precio del petróleo, que podría terminar el primer semestre liderando las ganancias en los mercados financieros, las bolsas, principalmente las estadunidenses, tendrán la peor primera mitad de año desde la década de los 70.