Es un ángel. En esa sencilla frase el presidente Andrés Manuel López Obrador manifestó su sentimiento y admiración por Elena Poniatowska, la mejor escritora de México.

Ayer, en el 90 aniversario del natalicio de la autora de La noche de Tlatelolco, el mandatario federal ocupó un espacio en la mañanera para hacer su personal homenaje a la escritora.

Elenita, un abrazo cariñoso, la queremos mucho. Es un ángel, es una gran escritora, de primer orden, una extraordinaria escritora, pero además con dimensión social, desde hace años, desde el 68.

Al hablar de la ganadora del Premio Cervantes 2013, López Obrador lució conmovido, emocionado. En las pantallas instaladas en el Salón Tesorería de Palacio Nacional se proyectó una fotografía donde aparecen ambos, sonrientes, en uno de los despachos de ese recinto histórico.

¡Miren!, apuntó el mandatario al ver la imagen e hizo una pequeña pausa para contemplarla.

En Poniatowska, aseveró López Obrador, se conjugan dos elementos: el trabajo intelectual y el amor a la gente, el amor a los demás. Y eso es muy difícil, porque hay grandes escritores, mujeres y hombres, pero no le tienen mucho amor al pueblo; y hay quienes le tienen mucho amor al pueblo, pero no escriben bien, digo. Y aquí son las dos cosas.

El tabasqueño lamentó que no podría estar presente en el homenaje que el gobierno federal brindó ayer al mediodía en el Palacio de Bellas Artes a la autora de Todo empezó el domingo, con la actividad Elenísima 90 años: Homenaje Nacional Elena Poniatowska, debido a que viajaría a Sonora, donde hoy viernes inicia una gira de trabajo.

No voy a poder asistir a su homenaje, pero es, sin duda, la mejor escritora de México, y ofrezco disculpas, para que no haya celos y sentimientos. Estamos muy contentos de que Elenita sea homenajeada. La queremos mucho, mucho, mucho, cerró el mandatario.