Con la reforma electoral que plantea el Presidente de la República, se acabarían los partidos políticos como negocio, por lo que quienes se dedican a la política tendrían que tener un oficio y no vivir del erario, afirmó la jefa del Gobierno capitalino, Claudia Sheinbaum.

La mandataria indicó que tampoco tiene sentido la existencia de organismos electorales locales, pues se instalan casillas únicas y la revisión de los recursos económicos se efectúa a escala federal.

Agregó que el Instituto Electoral de la Ciudad de México (IECM) ejercerá mil 200 millones de pesos este 2022, aun cuando no es año electoral. ¿Qué sentido tiene seguir manteniendo una burocracia local si, finalmente, las elecciones y las consultas pueden ser administradas, desarrolladas y ordenadas por un organismo nacional?, inquirió.

Respecto a reducir el número de diputados, señaló que el Congreso capitalino es uno de los más caros del país, a pesar de que desde la anterior legislatura logró reducir su presupuesto a la mitad.

Explicó que recibía 2 mil 100 millones de pesos; este año recibe mil 400 millones, casi lo mismo que la Universidad Autónoma de la Ciudad de México, nada más para que se den una idea de lo que representa el costo del Congreso.

Indicó que está de acuerdo en que haya menor número de diputados y presupuesto sea reorientado en beneficio de la ciudadanía.

Comentó que otras virtudes de la reforma es que los consejeros electorales serían votados por el pueblo de México, y a él tendrían que responderle, no como ahora, que algunos creen que deben su puesto a un partido político.

Morena apoya a la iniciativa

Por su parte, Morena en la Ciudad de México manifestó también su respaldo a la iniciativa de reforma electoral del Ejecutivo federal, de la que destacó la desaparición de los institutos y tribunales electorales locales.

En el posicionamiento de la institución política, a cargo de la representante propietaria del partido ante el IECM, Miriam Lisette Pérez, sostuvo que los organismos electorales locales generan gastos onerosos, superfluos, sin utilidad organizativa, democrática y sin resultados favorables y alicientes a la participación ciudadana.

Refirió que seis de los siete consejeros del IECM tienen ingreso superior al del Presidente y la jefa del Gobierno capitalino, y en las consultas sobre presupuesto participativo no ha logrado incentivar la participación de la ciudadanía, que el año pasado fue de 5 por ciento, contra 12 millones 321 mil 218 pesos gastados en el proceso.