El ballet alemán los apoya con vivienda, zapatillas y un espacio para practicar
Jueves 24 de marzo de 2022, p. 3
Berlín. Bailarines que huyeron de Ucrania y Rusia debido a la guerra encontraron un nuevo hogar temporal en la principal compañía de ballet de Berlín, que los ayuda con espacio para practicar, vivienda y zapatillas.
Alrededor de 200 bailarines en total han solicitado asistencia al famoso Ballet Estatal en la capital.
Christiane Theobald, directora artística interina de la compañía, consideró crucial que esos refugiados mantengan su práctica regular, aun cuando no tengan presentaciones públicas en este momento.
Lo importante es que completen el entrenamiento diario, porque es como cepillarse los dientes. Y la tragedia es que, si tienes fases en las que no puedes hacer eso en absoluto, entonces nunca podrás compensarlo.
Aunado a ello, dijo, ha estado contactando a directores de compañías en toda Europa para ver si puede ayudar a los bailarines a encontrar trabajo.
Lo que necesitamos ahora, por supuesto, son puestos en compañías, y los que vendrán... son principalmente bailarines de formación altamente clásica.
Si bien hay alrededor de 70 compañías de ballet en Alemania, no todas se centran en la danza clásica, como la mayoría de las compañías en Europa del este, que a menudo también practican la danza moderna. Así que será necesario que los nuevos bailarines se adapten, estudien y se acostumbren a los diferentes estilos.
Ayer, más de 30 bailarines practicaban sus movimientos en una sala de ejercicios en Berlín, entre ellos ocho refugiados, dos de ellos brasileños que habían huido de Rusia.
Muchos llegan a Berlín sin nada y han recibido ayuda del grupo, desde zapatillas hasta alojamiento.
Hay que entender que son personas que han dejado todo atrás, tie-nen muy poco consigo, comenzando con las zapatillas de punta
, dijo.
Debido a que la situación es tan dinámica, con la llegada de muchos bailarines a Berlín y el rápido traslado de algunos a otros destinos, la compañía indicó que ignoraba a cuántos se ha dado apoyo.
Entre los que escapan de Ucrania hay personas de todo el mundo que solían bailar allí en compañías de ballet. Y los de Rusia ya no quieren estar expuestos al régimen cada vez más opresivo del presidente Vladimir Putin.
La bailarina principal del Ballet Estatal, Iana Salenko, que es de Ucrania pero vive en Alemania desde 2005, también ha estado ayudando a los recién llegados. A través de su red personal, ha tratado de conseguirles audiciones en compañías de ballet de toda Europa, y les ha mostrado oportunidades en otros campos de empleo como la ópera.
Por supuesto, no soy la única, muchos otros directores en Europa están tratando de ayudar a este grupo
, resaltó la bailarina de 38 años.
Más de 3.5 millones de personas han inundado Europa escapando de la guerra, y en casi todos lados han sido recibidos con gran ayuda y solidaridad.
Alemania ha recibido a casi 240 mil refugiados ucranios, aunque las cifras reales quizá son más altas, ya que no necesitan visado para entrar en el país y la policía federal sólo lle-va registros de quienes llegan en treno autobús, pero no de quienes ingresan desde Polonia en automóvil.
Por su parte, renombrados bailarines internacionales, de Rusia a Argentina, pasando por Japón, Francia y Cuba, emocionaron al público londinense el pasado fin de semana en una gran gala de recaudación de fondos.
Estamos aquí por la democracia, para defender la libertad y los valores humanos
, declaró visiblemente conmovida la bailarina rumana Alina Cojocaru, coorganizadora del evento que recaudó 140 mil libras (unos 3 millones 738 mil pesos).
Bailarines y músicos donaron su trabajo y el dinero se destinará al Comité de Emergencia y Desastres, plataforma de la Cruz Roja británica y otras 14 organizaciones de ayuda a las víctimas de la guerra.
Por favor, no dejen de apoyarnos
, pidió el otro artífice de la velada, el ex bailarín ucranio Iván Putrov, al público que abarrotaba el London Coliseum y se puso en pie para escuchar el himno de su país cantado por la contralto ucrania Ksenia Nikolaieva con el coro de la English National Opera.
Tomaron después el escenario estrellas como la rusa Natalia Osipo-va, la argentina Marianela Núñez y la japonesa Fumi Kaneko del Royal Ballet. También la ucrania Katja Khaniukova, el español Aitor Arrieta y la estadunidense Emma Hawes del English National Ballet, entre otros.