París. Neymar y Lionel Messi fueron el foco de la ira de los aficionados del Paris Saint-Germain, quienes no perdonan la humillante eliminación en la Liga de Campeones. Los jugadores fueron abucheados en cada momento que tocaron el balón durante la victoria de ayer en casa por 3-0 ante Burdeos en la liga francesa.

Incluso tras anotar el segundo gol ante el colista Burdeos, Neymar, el jugador más caro del mundo (222 millones de euros) se llevó chiflidos. Messi tampoco escapó de la silbatina, ni siquiera cuando se embaló en una carrera desde el fondo.

La directiva también fue criticada. Una pancarta con la frase Direction Demission (Directiva Dimita) apuntaba al entrenador deportivo Leonardo y al presidente Nasser Al-Khelaifi.

Estoy triste por lo que viví hoy, dijo el técnico del PSG, Mauricio Pochettino. A nadie le gusta este fondo, me desanimó lo que pasó.

Aunque el PSG amplió a 15 puntos su ventaja como líder en el torneo local, donde suele dominar a placer, la afición reclama una consagración en Europa y el conjunto parisino volvió a naufragar en la Champions ante el Real Madrid.

Todos estamos afectados, sen-timos una desilusión y frustración, indicó Pochettino. Somos responsables, pero debemos asumir los próximos objetivos.

Hace unas semanas fueron eliminados en la Copa de Francia y se da por descontado que el técnico será remplazado la próxima temporada. Además, Kylian Mbappé, máximo goleador del PSG y autor del primer tanto frente al Burdeos, fue el único que se salvó de los abucheos que comenza-ron desde el anuncio de los nombres del 11 titular.

Al término del encuentro y en medio de los reclamos de la afición, Lionel Messi intercambió su camiseta con el jugador ucranio Danylo Ignatenko.