l Consentimiento se llama el libro que hace dos años conmocionó a la sociedad francesa. Lo escribió la también editora Vanessa Springora (1972); en él denuncia el abuso que sufrió cuando tenía 13 años del conocido escritor Gabriel Matzneff (1936). El relato de su experiencia personal sacó a debate el abuso sexual a menores y, de paso, acusó a sus conciudadanos, muy especialmente a la élite intelectual, de mirar hacia otro lado y tolerar la pederastia. Matzneff, dejó de ser un escritor premiado, elogiado y subvencionado por el Estado.

Un año después, otro libro, La familia grande, puso de nuevo en el escenario de la ignominia a la élite cultural y política de Francia. Lo escribió la jurista Camille Kouchner, hija de Bernard Kouchner, ex ministro socialista y cofundador de Médicos Sin Fronteras, y de Évelyne Pisier, politóloga y figura destacada de la izquierda. Camille cuenta en su libro cómo su hermano gemelo fue abusado sexualmente desde que tenía 13 años por su padrastro, el constitucionalista Olivier Duhamel, otra figura de la política y los medios de comunicación de Francia y presidente de la Fundación Nacional de Ciencias Políticas. Hoy vive en el ostracismo.

La publicación del libro de Kouchner fue la base de un nuevo movimiento, #MeTooInceste, por medio del cual más de 100 mil víctimas han explicado los abusos que sufrieron de pequeños. Una encuesta del instituto de investigación francés Ipsos reveló que una de cada 10 personas entrevistadas afirmó haber sufrido abusos sexuales por un familiar.

Además, la Comisión Independiente sobre el incesto y la violencia sexual contra los menores de edad por familiares puso en funcionamiento una línea telefónica para coadyuvar a romper el muro de silencio que ha rodeado esos abusos.

Por su parte, el Senado francés aprobó por unanimidad un proyecto de ley que reforma y endurece la legislación que existe sobre el abuso sexual contra menores. La iniciativa contempla que cualquier relación sexual con un menor de 13 años, consensuada o no, es un delito castigado con 10 años de prisión y una multa de 150 mil euros. Y extiende a más de 30 años la prescripción de delitos sexuales contra menores a partir de la mayoría de edad de la víctima. El código penal establece una pena de hasta 20 años de cárcel para casos de violación de un menor de 15 años.

En México también existen esos abusos. ¿Algún dato al respecto?