Exhorto a la Suprema Corte
Miércoles 29 de septiembre de 2021, p. 16
Este día nacional e internacional del maíz se da en el contexto del debate que se prevé en la Suprema Corte de Justicia de la Nación para determinar si la medida precautoria que suspendió desde hace ocho años la siembra de maíz transgénico es constitucional, a la vez que la industria alimentaria ha presentado 26 amparos en contra del decreto presidencial de diciembre que ordena la eliminación gradual del uso del glifosato.
La Red Nacional de Organismos Civiles de Derechos Humanos se pronunció por que la Corte ratifique la medida precautoria, ya que desde 2013 la demanda de acción colectiva contra la siembra de maíz transgénico ha presentado evidencias de los riesgos de la pérdida de la diversidad de maíz nativos presentes en distintas regiones del país.
En tanto, el decreto presidencial se sustenta en el orden público internacional, como son los acuerdos en materia de derechos humanos, que están por encima del derecho comercial internacional, advierte el estudio Agricultura sin glifosato, realizado por Manuel Becerra y Miguel Ángel Escalona, entre otros autores, y Greenpeace.
La siembra de maíz transgénico conlleva el uso del herbicida glifosato, como parte del paquete tecnológico de producción agroindustrial, por lo que es importante la defensa del decreto presidencial de sustitución gradual del uso de glifosato y de maíces transgénicos para poder garantizar la protección de las 64 razas de maíz nativo en México y de sus miles de variedades
, sostuvo Víctor Manuel Chima, del Centro de Derechos Humanos Fray Francisco de Vitoria, en la presentación virtual del reporte.
Si una norma o el cumplimiento de un tratado de libre comercio pudiera poner en peligro a las normas que protegen al medio ambiente, éstas tienen preeminencia. Las normas ambientales, en consecuencia el decreto, están enmarcadas en el derecho internacional que debe ser aplicado, según dispone la Constitución
, explicó Becerra, investigador nacional emérito del Sistema Nacional de Investigadores.
Con base en las alternativas agroecológicas para la sustitución del glifosato, hay prácticas que pueden funcionar en diferentes escalas, dependiendo del agroecosistema, con las que se pueden controlar las plantas que compiten con los cultivos principales, pero en equilibrio ambiental, explicó Miguel Ángel Escalona Aguilar, académico de la Universidad Veracruzana.
Viridiana Lázaro, especialista en agricultura y cambio climático de Greenpeace México, resaltó que este informe ya fue entregado a las secretarías de Medio Ambiente, Agricultura y Salud y a otras dependencias.