En reunión virtual con más de 800 investigadores adscritos al Programa Cátedras Conacyt, Elena Álvarez-Buylla, directora general del organismo, informó sobre los avances en la elaboración del nuevo Estatuto del Personal Académico (EPA), que permita garantizar los derechos laborales de los jóvenes investigadores, pero también fije sus obligaciones.

El propósito, indicó, es crear mejores condiciones para el desarrollo profesional de los catedráticos y garantizar los principios de igualdad y no discriminación. En meses recientes, integrantes de la Cátedras Conacyt han denunciado violación a sus derechos laborales y despidos injustificados.

Integrantes del Sindicato Independiente de Trabajadoras y Trabajadores de Investigación de Cátedras Conacyt han demandado la firma de un contrato colectivo de trabajo, proceso en el que, afirman, no ha habido avances.

José Antonio Ruiz Martínez, director de Consulta y Estudios Normativos del Conacyt, explicó que de acuerdo con el nuevo EPA, la evaluación de los catedráticos ahora será coordinada por el Conacyt, mientras la institución receptora sólo podrá dar una opinión sobre el desempeño de las actividades de los catedráticos.

La nueva normativa prevé mayor participación del personal de cátedras en las actividades y proyectos que desarrollen, con lo que se busca evitar que los proyectos se centralicen en la institución receptora, como ha venido ocurriendo desde la creación del programa.

En la segunda reunión virtual con catedráticos Conacyt, Álvarez-Buylla indicó que el EPA busca construir, con la participación e interlocución directa más amplia y transparente posible, mejores condiciones para el desarrollo profesional de todos los catedráticos mediante el reconocimiento de sus derechos y obligaciones académicas.

Indicó que el EPA, como los lineamientos del Programa Cátedras Conacyt, constituyen un marco normativo fundamental para la protección del personal y el respeto a sus derechos; además, ambos favorecen que las carreras y trabajos de investigación de los catedráticos impacten en la comprensión y solución de los grandes problemas nacionales, así como en el avance genuino del conocimiento en humanidades, ciencias, tecnologías e innovación y su incidencia virtuosa en la sociedad.