Johannesburgo. La variante delta, localizada por primera vez en India, está causando el repunte de infecciones de Covid-19 en Sudáfrica, señalaron ayer científicos y el gobierno del país, que analiza endurecer restricciones para controlar los contagios.

La cepa se expande por el mundo dejando un récord de contagios en San Petersburgo, la segunda ciudad más grande de Rusia, y provocando un retorno del confinamiento estricto en lugares como Bangladesh y Sídney, en Australia.

Sudáfrica, el país africano más castigado, registró ayer 18 mil 762 nuevos casos –su mayor incremento diario desde enero–, llevando el total de contagios oficialmente diagnosticados a casi 1.9 millones. De ellos, 59 mil 621 terminaron con la muerte del paciente.

Estamos en una fase de crecimiento exponencial de la pandemia con las cifras subiendo extremadamente rápido, y seguirán subiendo en las próximas semanas, afirmó Tulio de Oliveira, de la red de vigilancia genómica de Sudáfrica, en una conferencia virtual.

Para frenar esta expansión, vamos a necesitar ir hacia restricciones más duras y rigurosas (...) y necesitamos hacerlo urgentemente, indicó Koleka Mlisana, líder del comité asesor sobre el Covid-19 del gobierno sudafricano. El viernes, miles protestaron en Pretoria para exigir que se acelere la vacunación.

Autoridades sanitarias en todo el mundo están en alerta por la rápida expansión de delta, más contagiosa que el resto, especialmente entre la población no vacunada. Según la Organización Mundial de la Salud, esta cepa ya está presente en 85 países.

Esta variante está detrás del fuerte repunte del virus en Moscú, que parece haberse desplazado ahora a San Petersburgo. La antigua ciudad imperial, una de las sedes de la Eurocopa de futbol, registró 107 decesos en las pasadas 24 horas, el mayor número de muertos diarios por la enfermedad en una ciudad rusa desde que empezó la pandemia.

A escala nacional, Rusia registró 619 fallecidos en un día, su balance más elevado desde diciembre. Ante este repunte, las autoridades intentan convencer a sus escépticos ciudadanos para que se vacunen.

El Ministerio de Salud ruso comenzó con la distribución de su vacuna monodosis Sputnik Light.

El avance de delta está provocando una vuelta de las restricciones incluso en países que parecían haber dejado atrás la crisis sanitaria como Israel o Australia, uno de los que mejor ha gestionado la pandemia.

Las autoridades australianas anunciaron ayer que ampliaban a toda Sídney el confinamiento estricto decretado inicialmente en cuatro distritos de la ciudad, por la detección de más de 80 casos de la variante vinculados a la tripulación de un vuelo internacional.

Bangladesh, con 170 millones de habitantes y vecino de India, también decidió imponer un duro confinamiento tras registrar el viernes el segundo peor balance desde el inicio de la pandemia. Empresas y administración pública deberán cerrar y los ciudadanos sólo podrán desplazarse por razones médicas.

La pandemia ha dejado 180 millones 581 mil 657 casos confirmados y 3 millones 912 mil 420 fallecidos en el mundo, de acuerdo con la Universidad Johns Hopkins.