Jueves 24 de junio de 2021, p. 25
Reynosa, Tamaulipas, amaneció ayer con persecuciones y balaceras entre criminales y agentes de Seguridad Pública del estado, lo que agudizó la sicosis que se vive desde el sábado pasado, cuando un comando a bordo de varios vehículos ejecutó a 15 personas inocentes en las colonias Almaguer, Fidel Velázquez, Unidad Obrera y Bienestar.
El fiscal de la entidad, Irving Barrios Mojica, responsabilizó de estos crímenes a los grupos Ciclones y Escorpiones del cártel del Golfo, asentados en las también localidades fronterizas de Matamoros y Río Bravo.
Reveló que una hipótesis sólida es que estas células criminales buscan desestabilizar Reynosa para controlar el puente internacional Pharr, donde opera la facción llamada Los Metros y es considerado un punto importante para el cruce de droga e indocumentados a Estados Unidos.
La Fiscalía General de la República trabaja con las autoridades tamaulipecas para identificar a los líderes de estas bandas delictivas, señalaron fuentes federales.
Detallaron que Los Ciclones están encabezados por José Alfredo Cárdenas Martínez, El Contador, sobrino de Osiel Cárdenas Guillén, miembro de la vieja guardia de narcotraficantes que busca retomar el control del cártel del Golfo.
Indicaron que el grupo Los Metros fue constituido por Eduardo Costilla, El Coss, uno de los hombres más cercanos a Osiel Cárdenas, hasta que fue extraditado a Estados Unidos en enero de 2007.
La espiral de violencia continuó ayer desde temprano: tiroteos y movilización de patrullas en las colonias Jarachina Norte, Aztlán, Los Muros, Las Cumbres y el centro de la capital. Ciudadanos de esos sectores difundieron videos en redes sociales para alertar a la población.
Luis Alberto Rodríguez Juárez, vocero de seguridad, informó que alrededor de las 8:30 de la mañana fueron detenidos dos pistoleros en la colonia Los Muros y fueron decomisados una camioneta, un arma larga, dos chalecos antibalas, tres cartucheras y 12 cargadores abastecidos.
Agregó que elementos de la policía estatal redoblaron los patrullajes en Reynosa, limítrofe con McAllen, Texas; además, instalaron filtros de revisión entre esa localidad y Río Bravo.
En Twitter circularon mensajes de usuarios que llamaron a la población a resguardarse antes de las seis de la tarde porque la violencia continuará; previnieron además a las maquiladoras para que cancelen sus actividades, pues presuntos delincuentes bajan a los obreros
de los autobuses que los trasladan.
La Federación de Cámaras de Comercio desmintió dicha información y sólo sugirió a los empleados que tomen precauciones.
No obstante, ayer la maquiladora estadunidense Nibco, en acuerdo con el Sindicato Industrial Autónomo de Maquiladoras de la República Mexicana, que dirige Alberto Lara Bazaldúa, decidió que sus trabajadores se queden en casa a partir del tercer turno de la tarde del miércoles y hasta el próximo lunes, y que recibirán su salario completo.
El Grupo de Coordinación Estatal para la Construcción de la Paz llamó a no divulgar noticias falsas, ya que generan zozobra. Agregó que la policía estatal, la Guardia Nacional y el Ejército Mexicano se desplegaron en vialidades y parques industriales.
José Luis Márquez, secretario del ayuntamiento, invitó a los ciudadanos a denunciar y negó la versión de que la presidenta municipal panista Maki Ortiz incumplió acuerdos con el crimen organizado.
El obispo de Matamoros, Eugenio Lira Rugarcía, ofreció la tarde noche del miércoles una misa en la parroquia de Nuestra Señora de Guadalupe por las víctimas de los ataques del sábado y por la paz en Reynosa.
(Con información de Gustavo Castillo y El Mañana de Reynosa)