El peso mexicano ganó este lunes una pequeña parte del terreno cedido en las seis sesiones anteriores, al apreciarse 11 centavos, equivalente a 0.5 por ciento, para cerrar en 20.5090 por dólar spot, reveló el Banco de México (BdeM).

El tipo de cambio en México operó entre un máximo de 20.65 y un mínimo de 20.5130 pesos por dólar. Ante una escasez de información económica, el mercado cambiario mexicano registró un ajuste técnico, luego de acumular seis jornadas de depreciación, en la que acumuló una caída de 4.87 por ciento con respecto al dólar.

La divisa mexicana se vio presionada principalmente por un fortalecimiento generalizado del dólar tras un cambio en el tono de la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed) hacia una política monetaria más restrictiva.

Hacia delante es probable que el mercado cambiario mexicano se estabilice un poco, pero por el momento luce difícil que en el corto plazo pueda regresar a niveles observados hace dos semanas, por debajo de 20 pesos por dólar, prevé el área de análisis de CIBanco.

Los mercados financieros mexicanos estarán atentos a las pistas que proporcione el Banco de México el próximo jueves después de su reunión de política monetaria.

Aunque el consenso del mercado no espera un incremento en la tasa de referencia, actualmente en 4.0 por ciento, los agentes económicos estarán pendientes del discurso más restrictivo de la autoridad monetaria, en donde uno de sus principales riesgos es el incremento de los precios al consumidor.

En tanto, la Bolsa Mexicana de Valores (BMV) registró movimientos marginales en terreno negativo en dirección opuesta a sus pares estadunidenses en Wall Street.

El índice de precios y cotizaciones retrocedió 0.01 por ciento, a las 50 mil 315.69 unidades.

El principal índice accionario mexicano presentó una jornada volátil, en donde presentó un máximo en los 50 mil 447.32 puntos y un mínimo en 50 mil 107.06 enteros.

Durante la sesión de este lunes resaltó la escalada de los precios del petróleo, luego de una pausa en las conversaciones para reactivar el acuerdo nuclear con Irán, misma que podría llevar a una reanudación de los suministros de crudo en ese país.