La actividad de la pandemia de Covid-19 está pasando por su mayor caída en México desde que se inició la emergencia sanitaria el año pasado, pero al mismo tiempo la velocidad a que disminuye la dinámica de la enfermedad se está frenando y hay seis estados con un estancamiento o indicios de un rebrote, de acuerdo con la Secretaría de Salud.

Ruy López Ridaura, director del Centro Nacional de Programas Preventivos y Control de Enfermedades, explicó que hay evidencia de un descenso continuo por más de 15 semanas en la actividad de la enfermedad y que el país ha llegado a niveles más bajos de casos que los que se dieron después de la primera ola de contagios en 2020.

Por otra parte, 24 por ciento de la población mayor de 18 años ya recibió al menos una dosis de vacunas anti-Covid. El viernes se aplicaron 614 mil 832 para un acumulado de 29 millones 861 mil 331.

Ya estamos en un nivel inferior a lo que tuvimos en abril del año pasado, dijo López Ridaura al presentar en videoconferencia el reporte diario de la evolución de la pandemia y agregó que se estima la existencia de 19 mil 722 casos activos en el país, que representan 0.8 por ciento del total de los calculados durante la pandemia; también, que se han acumulado 2 millones 411 mil 503 casos confirmados.

La semana cierra con una baja de -4 por ciento en la actividad de la epidemia, agregó, tasa menor que la de la semana pasada, lo que significa que se está frenando la velocidad a que baja la circulación de la enfermedad.

De acuerdo con el funcionario, el panorama nacional refleja lo que sucede en algunas entidades, como Quintana Roo, única en semáforo anaranjado y donde cinco semanas de ascenso en la cifra de casos confirmados hablan de que hay señales de un rebrote. Otros estados con este indicio o donde se ha estancado la disminución de la circulación del virus son Tabasco, Campeche, Yucatán, Colima, Baja California Sur y Baja California.

Cifras presentadas por López Ridaura indican que 1 millón 924 personas han superado la enfermedad y que en total 223 mil 455 más han perdido la vida, 387 más que la víspera. Además, la ocupación hospitalaria se ha reducido en 87 por ciento respecto del punto de mayor actividad de la epidemia.