El consejero presidente del Instituto Nacional Electoral, Lorenzo Córdova, afirmó que cuando azotan fuertes vientos contra las instituciones electorales es preocupante que haya planteamientos que ven en una reforma electoral una especie de ajuste de cuentas. Por supuesto que las reglas son perfectibles, se pueden y deben revisar, pero ojalá que eso ocurra con el máximo consenso y como resultado de un análisis prudente, objetivo e informado.

Durante su participación en el seminario Elecciones 2021, la agenda de género, Córdova expresó que una eventual reforma en la materia debe realizarse bajo la lógica de decisiones calientes en tiempos fríos a fin de que se apruebe mediante el consenso de las expresiones políticas. Sería muy lamentable que después de tantos esfuerzos entremos en una lógica de contrarreformas, de erosión y del agotamiento del sistema electoral.

En su oportunidad, la magistrada del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación Janine Otálora alertó sobre el incremento de la violencia y la impunidad en el proceso electoral, pues durante el último año han sido asesinados 127 candidatos y políticos. Es una cifra que en una democracia es inadmisible. No podemos perder de vista esta violencia criminal, pues deben esclarecerse los crímenes políticos y no puede permanecer esta impunidad.

Quejas se han convertido en una extensión de campañas

Otálora se refirió también a una vertiente del proceso que se ha caracterizado por la hiperlitigiosidad a la que han apelado los partidos políticos que han visto en los tribunales una extensión de la campaña política. Esta apuesta ha incrementado sustancialmente los recursos que llegan al TEPJF, aunque, destacó que también los ciudadanos han aumentado sus quejas en este órgano.

Al abundar sobre la secuela de la polarización e intolerancia que se ha incrementado, Córdova dijo que las campañas son el espacio para que en el marco de la pluralidad política se confronten las posturas, pero han tomado carta de naturalización expresiones como que una institución deben morir o una institución debe erradicarse. Más allá de los tiempos complejos actuales, el sistema electoral es perfectible, y esa ha sido la apuesta de generaciones, pero una defensa del sistema electoral pasa simplemente por aceptar las reglas del juego”.

A su vez, Otálora resaltó la relevancia que tendrá en este proceso la agenda de género, tanto para consolidar la presencia de las mujeres en cargos de elección mediante decisiones para llevar la paridad de candidaturas al Congreso, desde 2018, y ahora para extenderla ahora a gubernaturas y presidencias municipales.

Las reformas legales han acelerado una mayor presencia femenina en los ámbitos de decisión, pero falta aún trabajar en los alcances y horizontes para que estos cambios realmente cumplan sus objetivos y ellas accedan a espacios de toma de decisiones.

Además, destacó, se han ampliado acciones afirmativas para otros sectores vulnerables con miras a favorecer su representatividad política, como indígenas, personas con discapacidad, migrantes y de la diversidad sexual.