Chetumal, QR., Ante la polémica desatada en torno al estatus del fuero del gobernador de Tamaulipas, Francisco Javier Cabeza de Vaca, el presidente Andrés Manuel López Obrador subrayó que para el gobierno federal queda claro que el panista ya no cuenta con esa protección legal. Sin embargo, destacó que la decisión corresponderá a la Suprema Corte de Justicia de la Nación, por lo que pidió ya no alentar la discusión y aguardar el fallo judicial.

Además, el jefe del Ejecutivo afirmó que la adaptación de servidores públicos para acatar las medidas de austeridad dispuestas por su gobierno lleva tiempo, aunque se ha avanzado bastante.

Luego que la semana pasada el pleno de San Lázaro avaló el proceso de desafuero solicitado por la Fiscalía General de la República contra el tamaulipeco, el Presidente indicó que cuenta con la misma información que ustedes tienen. No tiene fuero, pero el Congreso de Tamaulipas lo protegió.

No obstante, llamó a no adelantarse en favor de una opción o de otra, y esperar a que la Corte resuelva la interpretación a la Constitución, esto luego de que el Congreso local ratificó la protección al gobernador e interpretó que son ellos la última instancia que debe pronunciarse.

Por su parte, la secretaria de Gobernación y ministra en retiro, Olga Sánchez Cordero, expresó: ya hubo la declaratoria de procedencia, ya fue votada y en mi opinión el gobernador en ese caso ya no tendría el fuero constitucional.

Durante su conferencia de prensa de ayer, el Presidente explicó que poco a poco ha cambiado el estilo en el comportamiento de servidores públicos en contraste con el que caracterizó a gobiernos anteriores. Como ejemplo del cambio detalló que, durante el sexenio pasado, en el último viaje del avión presidencial el gasto por servicio de internet en la aeronave fue de 7 millones de pesos.

Con eso yo he volado casi un año, es lo que han costado mis boletos de avión mucho tiempo, agregó al emitir su posición tras la evidencia de que la cónsul de México en Estambul, Isabel Arvide, viajó el domingo en primera clase a Chetumal.

De nuevo, López Obrador reiteró ayer su crítica a medios de comunicación internacionales que, dijo, difunden noticias falsas, lo cual adujo que es responsabilidad en ocasiones de los corresponsales adscritos a México, que en administraciones pasadas eran apapachados.

El mandatario expresó, además, su postura sobre la aplicación de la prueba del Programa para la Evaluación Internacional de Estudiantes (PISA), después de que la OCDE se dijo preocupada por una posible suspensión en México. Ante ello señaló que continuará la evaluación, así como todo lo que sea bueno para el país.