La Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) reanudó después de más de 11 meses la aplicación de un subsidio al precio de la gasolina magna, presentado oficialmente como estímulo fiscal, para compensar el alza internacional del petróleo y variaciones en el tipo de cambio.

Detalló que el propósito del apoyo es proteger el poder adquisitivo de los consumidores finales de gasolinas, pues la economía de las familias se ha visto afectada por la pandemia de Covid-19.

El estímulo al impuesto especial sobre producción y servicios (IEPS) a las gasolinas no se aplicaba desde la primera semana de marzo.

Hacienda reiteró que el gobierno de México adquirió el compromiso de que los energéticos no tuvieran incrementos mayores a la inflación de un año a otro.

El acuerdo publicado este viernes en el Diario Oficial de la Federación (DOF) señala que en la semana del 6 al 12 de febrero el IEPS será de 4.97 pesos por litro, en lugar de los 5.11 pesos vigentes, lo que significa un ahorro de 2.79 por ciento.

El acuerdo de la SHCP señala que el estímulo gubernamental no aplicará a la gasolina premium ni al diésel.

Gabriel Yorio, subsecretario de Hacienda, destacó en su cuenta de Twitter que el apoyo gubernamental ayudar a mantener estable el precio y evitar los gasolinazos.

Esta medida se da en un contexto en el que los precios de los combustibles no son fijados por el gobierno, sino que dependen de las condiciones de los mercados, apuntó.

Destacó que las finanzas públicas mejoran con el aumento en los precios del petróleo, incluso descontando el mayor estímulo al IEPS, por lo que el logro de las metas fiscales tampoco se verá afectado ante un incremento en los precios del crudo.

Repunte de referentes internacionales

El precio de la mezcla mexicana de exportación subió este viernes 60 centavos y cerró en 55.17 dólares por barril, de acuerdo con la cotización publicada por Pemex.

El crudo mexicano registró el mejor precio desde el 10 de enero del año pasado y se encuentra más de 13 dólares por encima de lo presupuestado para este año.

De la mano de los referentes internacioanales, la mezcla mexicana concluyó una semana de ganancias, en la que acumuló 3.99 dólares, es decir, 7.79 por ciento.

El West Texas Intermediate cerró la semana con una ganancia cercana a 9 por ciento (56.85 dólares el barril), la mayor desde octubre, mientras el crudo Brent avanzó alrededor de 6 por ciento (59.34 dólares).

La distribución de vacunas contra el Covid-19 está alimentando las expectativas de que se relajen los confinamientos y las personas puedan trasladarse con mayor libertad, lo que elevará la demanda de combustibles.

El alza en los precios de las materias primas está sustentada en la expectativa de una recuperación económica global con la disponibilidad de vacunas. A pesar de que las vacunas se están distribuyendo con mayor velocidad en economías avanzadas, es probable que la recuperación de este grupo de países eleve la demanda por importaciones de materias primas, beneficiando las exportaciones de economías emergentes, señaló Banco Base.

Con información de Reuters