En enero próximo, la Secretaría de Educación Pública (SEP) iniciará el programa Aprende en casa III, que ahora contará con el apoyo de Altán Redes –empresa mexicana responsable de diseñar, desplegar, operar y comercializar la red compartida bajo un modelo de asociación público-privada– a fin de tener una tarifa cero y una mucho mejor cobertura en el país.

Esta nueva versión del programa continuará con el apoyo de las cadenas nacionales, privadas y públicas, pues no se puede impartir sólo por un canal, sino tener horarios diferenciados y cubrir la mayor área posible, además de que con éste concluirá el ciclo escolar 2020-2021, con lo que se cumpliría el primer ciclo lectivo en la historia bajo la modalidad a distancia.

La coordinadora de Relaciones Internacionales de la dependencia, Jimena Saldaña Gutiérrez, informó que la SEP está lista para impartir desde enero esta nueva versión de Aprende en casa en el sistema de educación mixta, que combinará clases presenciales y a distancia, en algunos estados con semáforo verde, y conforme lo decidan las autoridades estatales y locales.

Al exponer vía remota el desarrollo del programa de Aprende en casa a funcionarios del gobierno de Japón, interesados en la estrategia de educación a distancia implementada en México ante la pandemia por Covid-19, la funcionaria agregó que los programas transmitidos por Aprende en casa I y Aprende en casa II, a diciembre de 2020, suman 4 mil 550, lo que representa una cifra en televisión muy poco vista y un esfuerzo inédito.

Informó también que gracias al convenio con Google se logró la gratuidad de estas aplicaciones, así como la capacitación docente a través de 20 seminarios en línea.

Sobre el apoyo de Altán Redes y el uso de su red compartida, ésta es una moderna red de banda ancha móvil de voz y datos 4.5G, que con su infraestructura y conectividad transforma el espectro de 700 megahercios y le da mayor cobertura y capacidad. Se trata de una concesión a 20 años otorgada por el gobierno federal a Altán Redes tras ganar la licitación pública internacional que surgió por la reforma en telecomunicaciones.

A octubre pasado, Altán Redes cubría ya 38 por ciento del plan de cobertura social, es decir, 35 mil 715 poblaciones rurales, las cuales se encuentran en zonas marginadas que carecen de conectividad, y donde el programa educativo a distancia muestra deficiencias en su cobertura. Actualmente dota de cobertura a 70 por ciento de la población, incluyendo zonas de alta marginación y exclusión digital.