Londres. El Chelsea volvió a la senda de la victoria en la Liga Premier después de vencer este lunes por 3-0 al West Ham United, en uno de los dos partidos que cerraron la decimocuarta jornada del campeonato.

El equipo de Frank Lampard afrontaba el choque tras las derrotas ante el Everton y el Wolverhampton, lo cual lo había alejado de los primeros sitios de la tabla y necesitaba el triunfo para no perder la estela del Liverpool, que después de este triunfo lo aventaja con seis puntos.

Con 25 unidades, los Blues superan a sus vecinos del Tottenham para situarse quintos, en un pelotón agrupado a la caza del Liverpool, líder con 31 puntos. Leicester es segundo con 27, Manchester United tiene 26 unidades, igual que el Everton, ubicado en cuarto sitio.

Los Hammers, con mucho menos talento sobre el césped que el Chelsea, llegaron a dominar a su rival en fases del partido con un juego más elaborado y colectivo.

Sin embargo, no cuadraron ningún disparo entre los tres palos de seis intentos en Stamford Bridge, mientras el Chelsea envió al arco siete de sus 11 tiros.

El partido comenzó bien para el equipo de Lampard. Se adelantaron en el minuto 10 con un remate de cabeza del central brasileño Thiago Silva a la salida de un córner.

Pero con la ventaja en el marcador el Chelsea cedió el dominio. El delantero alemán Timo Werner no vive su mejor momento, con los nueve últimos partidos sin ver puerta, y este lunes falló varios centros y disparos.

Sin embargo, la suerte no lo abandonó y en uno de esos disparos erráticos el balón llegó a Tammy Abraham, titular en punta en lugar de Olivier Giroud, quien marcó el 2-0 en el minuto 78.

Dos minutos después, de nuevo Abraham sentenció el partido anotando casi sin ángulo con el arquero en el suelo luego de un choque con un rival.

En el otro partido de este lunes, el Burnley (16) derrotó 2-1 al Wolverhampton (11) del convaleciente mexicano Raúl Jiménez, y sumó tres puntos que le permiten escapar de los puestos de descenso, que marca el Fulham.

Pero los goles de Ashley Barnes, al minuto 35, y del neozelandés Chris Wood, al 51, dieron los tres puntos a un Burnley que suma ya cuatro fechas al hilo sin perder y que cuenta con tres unidades de ventaja respecto a la zona de descenso.

Barnes se elevó para rematar de cabeza al poste opuesto a los 35 minutos. Su disparo de corta distancia pasó entre las piernas del guardameta portugués Rui Patricio y puso al frente al Burnley en la cancha del Turf Moor empapada por la lluvia. Wood también anotó con un tiro a un par de metros del arco al mandar el balón al techo de las redes.

El técnico de los Wolves, Nuno Espírito Santo, dio entrada al terreno de juego a la hora de partido al internacional español Adama Traoré y al portugués Fabio Silva, logrando este último el 2-1 de penal en el minuto 88.