Aeroméxico obtuvo el aval de la Corte de Quiebras del Distrito Sur de Nueva York para aplicar un plan de liquidaciones por 6 millones 200 mil dólares a sobrecargos y asistentes de vuelo en la empresa. La moción aprobada por la juez Shelley Chapman implica que la aerolínea está autorizada para gastar en indemnizaciones para 766 empleados.

El anuncio se da en momentos en que la aerolínea pretende modificar los contratos laborales con las asociaciones sindicales de Pilotos Aviadores (ASPA) y Sobrecargos de Aviación (ASSA) de México, con el argumento de una restructuración para enfrentar la crisis financiera provocada por el Covid-19.

La empresa declinó declarar sobre la decisión de la juez sobre liberar recursos financieros para liquidaciones. La aerolínea desde julio se encuentra en restructuración bajo el capítulo 11 de la Ley de Quiebras de Estados Unidos.

En medio de la crisis a raíz de la pandemia en la aviación mundial, con el cierre de fronteras, restricciones de vuelos y menos demanda de los usuarios, Aeroméxico realizó ajustes salariales entre sus trabajadores, antes de iniciar el proceso en Estados Unidos.

Continuaría con la rotación laboral hasta por un año

Hace un mes se dio a conocer que la firma despediría a 616 sobrecargos, (un 22.6 por ciento de la plantilla) y continuaría con la rotación laboral hasta por un año, del 1º de octubre de 2020 a septiembre de 2021. Además se darían 323 permisos sin goce de sueldo, pero sí con prestaciones y la disposición de Aeroméxico para reintegrar a este personal en mejores condiciones de mercado.

En la resolución de la juez Chap-man, que abarca también a 150 asistentes de vuelo, se detalla que las disposiciones y el efecto de esta orden sobrevivirán a la conversión, desestimación y/o cierre de estos casos del capítulo 11, confirmación de un plan de reorganización y/o consolidación sustantiva de esos casos.

El fin de semana, Aeroméxico presentó a ASPA y ASSA la propuesta de modificación y señaló que para seguir operando requiere aplicar, a más tardar este 31 de diciembre, un acuerdo multianual de cinco años con diferentes condiciones para su sustentabilidad, entre ellas reducir prestaciones laborales y eliminar pagos extraordinarios, entre otros.

José Suárez Valdez, secretario de prensa de ASPA, manifestó que no negociará la propuesta por inaceptable e inviable. ASSA envió a sus agremiados una circular con los puntos de la propuesta de restructuración, a fin de analizarlos.