El escritor Leonardo Padura y el editor Mauricio Bares presentaron el libro en la edición 20 de la FIL Zócalo
Lunes 19 de octubre de 2020, p. 7
Una muestra del relato policiaco cubano actual ofrece la antología Isla en negro, que, según el escritor y compilador Rafael Grillo, marca una gran diferencia y rompe con lo que se había escrito de ese género en la isla en décadas pasadas.
Publicada en México de manera digital por el sello Nitro Press, Isla en negro reúne narraciones cortas, historias de crimen y enigma
, escritas por autores cubanos, en su mayoría jóvenes, que, desde una multiplicidad de variantes conceptuales, referenciales y argumentales, se acercan a temas específicos de la narrativa policiaca, a diferencia de esa otra literatura cubana, que si bien implicaba cierta violencia o crimen, estaba marcada por lo social-revolucionario, explicaron el escritor Leonardo Padura, el editor Mauricio Bares y el mismo compilador Rafael Grillo, durante la presentación del libro en la 20 edición de la Feria Internacional de Libro del Zócalo (FIL Zócalo), que este año se realizó de manera virtual.
En la compilación hay relatos de escritores reconocidos del género, como Rodolfo Pérez Velero y Lorenzo Lunar, así como autores de las nuevas generaciones, entre ellos Yamilet García Zamora, Rebeca Murga y Reinaldo Cañizares, así como creadores conocidos por su obra en otros géneros, como Emerio Medina, Jorge Enrique Lage, Ahmel Echevarría, Marcial Gala, Eduardo del Llano y Leonardo Gala, pero que como parte de su trayectoria han escrito cuentos policiacos.
Apuesta por el carácter literario
Los relatos de Isla en negro se diferencian de la producción anterior en el terreno de la literatura policial cubana. Se trata de un fenómeno literario independiente, cuya narrativa implica mayor libertad creativa y estrategias conceptuales. Hay desde cuentos satíricos e inteligentes, hasta aquellos que reflejan conflictos violentos de la realidad. Hay relatos cuyas historias se desarrollan fuera de Cuba y cuentos que ocurren en el futuro
.
Es una compilación en la que se aprecia una intención deliberada por escribir un relato policial. Estamos ante una antología que apuesta por su carácter literario; es decir, se trata de un ejercicio estético con características conceptuales del género
, comentaron los presentadores.
De acuerdo con Rafael Grillo, se aprecia el trabajo de autores de varias generaciones desde una producción literaria que parte de 2000 a la fecha, con la intención de saber si el género policial cubano había emprendido otros derroteros, en comparación con las corrientes más modernas del género.
El resultado es que ahora se puede decir que sí se está produciendo una nueva literatura policial cubana, ecléctica y diversa
, concluyó el compilador.