El Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas (INPI) está abierto al diálogo. En ese tenor, la tarde del lunes ya hubo un primer encuentro entre el gobierno de la Ciudad de México, encabezado por Claudia Sheinbaum; el instituto; funcionarios de la Secretaría de Gobernación, y la agrupación otomí que desde el lunes tomó las instalaciones del instituto, informó Adelfo Regino Montes, titular de la institución.

En entrevista con La Jornada, Regino Montes precisó que el INPI no cuenta con programas de vivienda y, por lo tanto, no tiene recursos para apoyarlos, pero podemos hacer la gestión ante las instancias correspondientes.

Detalló que el planteamiento central de la agrupación que mantiene ocupadas las oficinas del INPI es regularizar el predio que han ocupado y la construcción de las viviendas.

Llamó a los inconformes a cuidar las oficinas del instituto. Espero que se solucione y que tengan la debida atención a su problemática, y en el marco de corresponsabilidad también liberen y respeten las instalaciones del INPI. Asimismo, destacó que solicitaron a la Comisión de Derechos Humanos de la Ciudad de México que nos ayude en la mediación, y a partir del diálogo resolver esta demanda de vivienda.

Agregó que recibimos y atendemos a autoridades de los 68 pueblos indígenas del país, y si no están abiertas las oficinas, no estaremos en condiciones de atenderlos. Por eso hacemos el llamado al diálogo y a la construcción de acuerdos en relación con la problemática que han planteado y encuentren justicia a sus legítimas demandas.

Comentó que cuando fueron tomadas las oficinas ubicadas al sur de la Ciudad de México sólo 30 por ciento del personal, fundamentalmente directivos, estaba laborando de manera presencial debido al Covid-19.