Jueves 10 de septiembre de 2020, p. 17
El Covid-19 ha sido un evento disruptivo
que cambió radicalmente la forma de vida. El aislamiento social, los problemas económicos, el temor al contagio, la pérdida del empleo y de seres queridos por la enfermedad, así como el estrés postraumático, incidirán en los índices de suicidio, consideraron expertos.
En el contexto del Día Mundial para la Prevención del Suicidio que se conmemora hoy, Carlos Valencia, de la Red Mundial de Suicidólogos, indicó que en México cada año se registran 7 mil casos y especificó que la prevalencia más alta está en Mérida, Yucatán.
Dijo que el gobierno emprenderá un plan para evitarlo y que la pandemia ha generado una ideación suicida y estrés postraumático
.
En el encuentro virtual Entre la pandemia y el suicidio, el padre de un joven que se quitó la vida dejó en claro que “la persona que se suicida no quiere morir, sino dejar de vivir de esa manera (…) antes me preguntaba por qué me sucedió, y ahora me preguntó para qué (…) hay que decirle sí a la vida ante cualquier circunstancia”.