A partir de esta semana, el Gobierno de la Ciudad de México iniciará operativos de verificación en bares, cantinas y antros, luego de que se ha detectado que establecimientos de ese tipo han comenzado a operar, pese a que aún no está permitido por la pandemia de Covid-19, informó la titular del Ejecutivo local, Claudia Sheinbaum Pardo.

Al señalar que se tienen reportes de que en Azcapotzalco, Coyoacán y el centro de la ciudad operan negocios de esos giros sin autorización, recordó que éstos sólo pueden abrir si cambian a restaurantes en tanto se supera la emergencia sanitaria.

El 7 de agosto, la administración local puso en marcha el programa Reabre para dar la posibilidad a estos establecimientos, incluidos salones de fiestas, de reiniciar actividades, siempre y cuando cambien su giro de manera temporal a restaurantes, toda vez que su reapertura está prevista para cuando el semáforo epidemiológico esté en color verde.

Sin embargo, a un mes de que se lanzó la estrategia, de los más de mil 500 negocios de los giros mencionados, 135, poco menos de 10 por ciento, han optado por el cambio propuesto por las autoridades, de los cuales 107 son bares, cantinas y similares; 24, salones de fiestas y de convenciones, mientras los otros cuatro son centros nocturnos y discotecas.

La mandataria subrayó que en los próximos días el Instituto de Verificación Administrativa iniciará un proceso de revisión para garantizar que dichos negocios no estén dando servicio, a menos que se hayan reconvertido.

Agregó que el gobierno es consciente de cómo la pandemia ha afectado la situación económica y por ello es que se están dando facilidades, como la ampliación de horarios para los establecimientos comerciales que ya están abiertos, tras un estudio que indica que es muy baja la probabilidad de que se incrementen los casos de Covid-19 por esta medida.

Insta a cooperar

Pero, subrayó Sheinbaum, hay actividades que todavía no están permitidas, por lo que habrá una revisión, particularmente a los bares, pues hay reportes de que algunos han estado abriendo sin tener autorización.

Insistió en que estos establecimientos sólo pueden abrir si cambian a restaurantes y con las medidas fijadas para éstos, como hacerlo a una capacidad de 30 o 40 por ciento, en el caso de los que tengan mesas en el exterior.

Necesitamos de la cooperación de todos. No queremos empezar a cerrar negocios, no es el objetivo, ya están viviendo una situación económica muy difícil como para que aparte tengan el problema de que se les esté sancionando.

Destacó que la pandemia ha sido muy larga; ya vamos a cumplir seis meses, pero hay que tener paciencia, colaboración y solidaridad para que se puedan abrir las actividades económicas, evitar el mayor número de despidos, pero, al mismo tiempo, no generar las condiciones con las que pueda crecer el número de contagios.