El cambio de adscripción de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) fue una sorpresa para su titular, José Alonso Novelo. Nadie le informó del proyecto, ni el secretario Jorge Alcocer, ni el subsecretario Hugo López-Gatell, a cuya oficina quedará adscrita la autoridad regulatoria, afirmaron funcionarios de la Secretaría de Salud (Ssa).

Lo anterior, no obstante que el lunes por la tarde, Novelo y López-Gatell se reunieron varias horas para ver los temas relacionados con la potencial vacuna contra Covid-19 en cuya producción participará un laboratorio mexicano.

Al día siguiente, el acuerdo secretarial se presentó a revisión de la Comisión Federal de Mejora Regulatoria. Es la mejor evidencia de las diferencias y desacuerdos que existen en la dependencia federal.

Esto quedó claro desde la salida de Asa Cristina Laurell, quien ocupó la Subsecretaría de Integración y Desarrollo del Sector Salud y denunció la pretensión del secretario Alcocer y el titular del Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi), Juan Antonio Ferrer, de desaparecer el área a su cargo.

La medida se concretó en el proyecto de acuerdo secretarial difundido el martes pasado, el cual de manera incomprensible plantea que la subsecretaría quedará adscrita a la oficina del titular de la Ssa. Es el camino para su desaparición porque en la estructura orgánica ya depende del secretario, advirtieron los entrevistados.

Respecto de la Cofepris, recordaron que como parte de la reingeniería que se planeaba para la Ssa, el año pasado estaba la idea de unir en un solo organismo a la Comisión de Control Analítico y Ampliación de Cobertura y el Instituto de Diagnóstico y Referencia Epidemiológica (Indre). El primero tiene como misión vigilar y garantizar la calidad, seguridad y eficacia de medicamentos, alimentos, bebidas y otros productos de control sanitario.

El Indre es el órgano encargado de ofrecer productos y servicios de diagnóstico, como ha sido en la pandemia de Covid-19. Depende de la Subsecretaría de Prevención y Promoción de la Salud y es responsable de validar la calidad de las pruebas de diagnóstico del virus SARS-CoV-2 que se aplican en el país.

Con el cambio de adscripción de la Cofepris a la oficina de López-Gatell, también se abre la vía para este y otros cambios en las funciones y facultades de la comisión que, como autoridad regulatoria, debería ser un órgano independiente y con autonomía para la toma de decisiones.

El cambio de adscripción va en sentido contrario y coloca al organismo en una situación de conflicto de intereses, explicaron funcionarios y especialistas consultados. Desde la subsecretaría podrían salir las órdenes para otorgar o no registros sanitarios, por ejemplo, dijeron.