Senadores y diputados del grupo de trabajo de Congreso digital definieron analizar, por separado, las iniciativas de reforma para legislar en materia de sesiones a distancia en caso de una emergencia nacional, dando prioridad a reformas al reglamento de cada cámara y luego, cuando existan condiciones, analizar cambios a la Constitución.

Los senadores pidieron a los diputados buscar consensos en cada recinto legislativo para llevar una propuesta viable a una conferencia entre las dos cámaras.

Durante la reunión a distancia de este martes, la vicepresidenta de la mesa directiva de San Lázaro, Dolores Padierna Luna (Morena), señaló que la propuesta de su bancada es que las cámaras inicien el periodo de sesiones a partir de un reglamento de consenso, y cuando pase la emergencia considerar una reforma constitucional.

Refirió que la Carta Magna sí da posibilidades al Congreso de trabajar mediante un elemento: que más de la mitad de los legisladores de cada recinto deben concurrir para que sea válida la sesión.

Consideró que se trata de dar una interpretación evolutiva al término de concurrencia, para ampliarlo a concurrencia en tiempo, que se podría garantizar mediante el reconocimiento facial de los legisladores en el registro de asistencia y el voto.

Esto es, mientras se logre en San Lázaro el quórum de 251 en el salón, el resto podría estar de manera remota. Estaríamos todos juntos, al mismo tiempo, para cumplir con nuestra responsabilidad sin faltar a la Constitución en dos puntos finos: concurrencia, quórum y ser fidedignos de quién vota.

Las presidentas del Senado y de San Lázaro, Mónica Fernández (Morena) y Laura Rojas (PAN), respectivamente, informaron que existen 19 iniciativas de reforma a la Constitución, 10 de cambios a la Ley Orgánica del Congreso, seis al reglamento del Senado y cinco al de la Cámara de Diputados.

Fernández indicó que la mayoría en el Senado está por garantizar el quórum presencial y tomar previsiones legales que den certidumbre al Congreso para sesionar en las condiciones de emergencia sanitaria y ante cualquier contingencia.

Rojas refirió que de una consulta que ambas hicieron al presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, Arturo Zaldívar, presentaron por separado iniciativas de cambios a la Constitución.

La palabra concurrencia está sujeta a una interpretación de poder concurrir en un tiempo o en lugar, el gran problema es precisamente esa interpretación y, por tanto, las decisiones del Congreso estarían en riesgo, dijo.