En el transcurso del presente mes y hasta el 10 de agosto se realizan asambleas en 2 mil 245 escuelas, ubicadas en zonas de muy alta y alta marginación, que no tienen agua potable, para sugerirles que los 850 millones de pesos pendientes del programa La Escuela es Nuestra se destinen a obras para contar con este vital líquido, informó Gabriel García Hernández, coordinador general de Programas para el Desarrollo.

Señaló que con este programa, que entrega recursos a los comités de participación social para mejoras en los planteles educativos, más de 48 mil ya han ejercido los fondos correspondientes.

De las otras 103 mil 268 escuelas ubicadas en este tipo de zonas ya se ha beneficiado a 49 mil 330, lo que representa un avance de 48 por ciento.

Al participar en la conferencia vespertina en Palacio Nacional, el funcionario resaltó que 89 por ciento de las escuelas indígenas ya han sido atendidas.

Ahí mismo, el titular de la Secretaría de Educación Pública (SEP), Esteban Moctezuma Barragán, informó que ya se ha integrado casi 93 por ciento de los Comités Escolares de Administración Participativa del programa La Escuela es Nuestra.

Acompañado de la secretaria del Trabajo y Previsión Social, Luisa María Alcalde, Moctezuma Barragán informó que las Becas Benito Juárez, que otorga el gobierno federal de manera universal a los estudiantes de educación media superior, han contribuido en la retención de 3 por ciento de los alumnos en este nivel educativo.

Dijo que se desconocen las cifras de deserción que se pudieran presentar en el sistema educativo nacional, tras haber concluido el periodo escolar con clases a distancia. Esto se sabrá con certeza una vez iniciado el próximo ci-clo escolar.

Sin embargo, insistió que desde el inicio del ciclo se pondrá en marcha un sistema de alerta temprana, en el que los profesores trabajarán en la identificación de alumnos que dejen de asistir a la escuela, con el fin de buscar a los padres de familia o tutores para convencerlos de continuar con el proceso educativo de sus hijos.