Viernes 10 de julio de 2020, p. 21
A tres meses de que se aplicó la cancelación de visitas y otras medidas de seguridad en las prisiones ante la pandemia de Covid-19, se han registrado mil 100 contagios y más de 200 muertes en los centros penitenciarios de 26 estados, lo cual pudo haberse evitado con una estrategia de planificación apegada a los derechos humanos, señaló la organización civil Asilegal.
Indicó que con su monitoreo permanente de la emergencia sanitaria es posible constatar que el brote del virus ha golpeado centros penitenciarios en 26 de los 32 estados, cobrando 112 vidas de personas privadas de libertad y 130 custodios, además de causar 939 contagios entre la población y 161 entre trabajadores regulares de los centros
. Detalló que pudo documentar 81 casos en abril, 307 en mayo, 499 en junio y 213 hasta el 6 de julio, para un promedio diario de 11.
Estas cifras, dijo Asilegal, “pudieron evitarse con la excarcelación planeada y apegada a derechos humanos. La inacción, el cierre de juzgados y la indiferencia han resultado en una catástrofe penitenciaria en la que las soluciones
menospreciaron derechos fundamentales y, a fin de cuentas, no han servido”.
Por otro lado, la organización destacó que las entidades con mayor número de contagios –Jalisco, Puebla, Ciudad de México, Chihuahua y estado de México– no necesariamente son las que presentan la mayor tasa de letalidad, como sí lo hacen Baja California, Morelos y Guerrero. En el caso de las primeras dos entidades, ocho de cada 10 personas contagiadas por Covid mueren, mientras en Guerrero la proporción es de cuatro por cada 10.
Ello evidentemente tiene que ver con una serie de factores, como la atención médica oportuna y de calidad; alimentación sana, variada y suficiente, así como la aplicación de medidas de higiene en los espacios concurridos, tanto por las personas privadas de la libertad como de los trabajadores de las penitenciarías
, resaltó el colectivo.
Recordó que, de acuerdo con el Diagnóstico Nacional de Supervisión Penitenciaria, Baja California, Morelos y Guerrero se encuentran entres las 16 entidades con calificación promedio de 5, al sufrir abasto insuficiente de medicamentos, falta de personal para atender a los internos y graves deficiencias en la existencia de un área médica y consultorio, así como ausencia de alimentación de calidad.