Sábado 27 de junio de 2020, p. 11
En el contexto del Día Internacional en Apoyo de las Víctimas de la Tortura –que se conmemoró ayer–, la Oficina en México del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ONU-DH) llamó a garantizar el derecho a la justicia para quienes han sufrido este agravio, muchos de los cuales han sido fabricados
como culpables en procesos judiciales irregulares.
La justicia en estos casos debe comenzar por atender las secuelas de los actos de tortura, que llegan a constituir un obstáculo infranqueable para que las víctimas accedan a cualquier posibilidad de reparación por el daño causado
, afirmó Jesús Peña Palacios, representante adjunto de la ONU-DH.
De acuerdo con lo observado por la Oficina, la tortura en México no ocurre al azar, sino que va dirigida a los sectores más vulnerables de la población. Generalmente se ha cometido en contra de personas que, por sus condiciones de pobreza o abandono, se encuentran en una posición de desventaja para hacer frente a los cargos con los que son llevadas a los tribunales, lo que a su vez ha ocasionado que sus denuncias de tortura no sean escuchadas
, añadió el especialista.
Por lo anterior, la ONU-DH alentó a las autoridades mexicanas a reforzar o crear otros mecanismos de revisión de casos de personas injustamente procesadas o condenadas por acusaciones fabricadas con base en la tortura, así como a publicar el Programa Nacional para Prevenir y Sancionar la Tortura, cuyas disposiciones beneficiarán a las víctimas de este agravio.
Malos tratos a Assange
La Coalición Vida y Libertad Julián Assange #24F realizó ayer una protesta global virtual, consistente en un video mediante el cual denuncia la tortura y malos tratos que ha recibido el fundador de Wikileaks, quien se encuentra detenido desde hace más de un año en condiciones de gran severidad.
Edith Cabrera, integrante de dicho colectivo, señaló que a pesar de sufrir de osteoporosis y afectaciones severas en los pulmones, las autoridades de Reino Unido le han negado a Assange la posibilidad de salir bajo fianza y lo mantienen en su celda 23 horas al día, lo que significa un acto de tortura física y sicológica.