Las pandillas se han replegado
De marzo a la fecha se han reportado reducciones de homicidios en Honduras, Guatemala y El Salvador
Martes 12 de mayo de 2020, p. 21
Tegucigalpa. La violencia que azota a los países del Triángulo Norte de Centroamérica dio un respiro a sus empobrecidos pobladores, con una reducción en los índices de homicidios por las medidas de cuarentena impuestas para frenar la propagación del nuevo coronavirus.
Guatemala, El Salvador y Honduras, acostumbrados a sepultar muertos causados por pandilleros y narcotraficantes, se enfrentan al terror del Covid-19 con sistemas de salud endebles y gran parte de su población encerrada en sus casas, lo cual propició una reducción en la violencia criminal.
La baja se dio a pesar de que El Salvador vivió un fin de semana sangriento, con 50 homicidios perpetrados del 24 al 26 de abril, en acciones atribuidas a las pandillas que controlan comunidades en todo el país.
Pandilleros y narcotraficantes que sometieron a los tres países a lo largo de tres décadas, elevando los homicidios hasta 90 por cada 100 mil habitantes en algunos casos, dieron una tregua que no había sido posible ni con estratosféricos gastos estatales en policías y militares.
Los toques de queda que impusieron los gobiernos desde marzo ante la amenaza de la pandemia tuvieron la imprevista consecuencia de un repliegue de los delincuentes que usualmente controlan barriadas pobres de las ciudades de los tres países.
En Honduras, desde marzo, cuando empezó la cuarentena, “se reportó la reducción de 217 homicidios, en comparación con 2019; en abril fue de 157 y en la primera semana de mayo la disminución fue de 38, de acuerdo con el ministro de Seguridad, Julián Pacheco.
En Guatemala, el Instituto Nacional de Ciencias Forenses indicó que en febrero pasado murieron de forma violenta 262 personas, pero la cifra bajó a 154 en marzo y repuntó a 174 en abril, sumas mucho menores a las de abril de 2019, cuando murieron 376.
Según cifras oficiales, en El Salvador, en los primeros cuatro meses de 2020 se reportaron 441 homicidios, 58 por ciento menos que en igual periodo de 2019.
Honduras, con 9 millones de habitantes, cerró 2019 con una tasa de homicidios de 44.7 por cada 100 mil habitantes, equivalente a siete veces el promedio mundial de 6.1 por 100 mil, según la Organización Naciones Unidas.
El Salvador terminó 2019 con 35.6 homicidios por cada 100 mil habitantes y Guatemala con 23.5.
El dirigente de los transportistas hondureños, Jorge Lanza, declaró a la agencia Afp que los pandilleros han desistido de las extorsiones por primera vez desde hace una década, aunque el transporte público no está trabajando debido a las restricciones oficiales.
Sin embargo, mientras baja la criminalidad, sube la violencia doméstica por el encierro en los hogares, según el Ministerio Público hondureño.
En Tegucigalpa y San Pedro Sula, la segunda ciudad de Honduras se reciben de 15 a 20 denuncias al día, indicó Yuri Mora, portavoz del MP.
Agregó que en condiciones normales no pasan de ocho denuncias diarias.