Conforme al calendario electoral, este sábado debieron empezar las campañas políticas para la renovación de 84 alcaldías en el estado de Hidalgo y del Congreso local en Coahuila, con la elección de 25 diputados de mayoría relativa y representación proporcional.

Sin embargo, ya que están suspendidas las actividades por parte del Instituto Nacional Electoral (NE), así como los órganos electorales de ambas entidades, aún no hay fecha para la reprogramación de los comicios, que son los únicos que están previstos para efectuarse este año.

Sin embargo, los efectos de la postergación obligada por la pandemia del Covid-19 que hay en el país podrían no ser los mismos en función no sólo del calendario electoral, sino de las fechas previstas para la renovación de las alcaldías en Hidalgo y de diputados locales en Coahuila. En este último caso, la legislación estatal estipula que el relevo en el Congreso local se efectuaría el 1º de enero de 2021.

En el caso de las elecciones en Hidalgo las implicaciones de la postergación tendrían un mayor impacto legal porque la toma de posesión de los nuevos alcaldes en esa entidad esta prevista para el 5 de septiembre, es decir, tres meses después de la fecha originalmente establecida para las elecciones: 7 de junio.

La suspensión de actividades preparatorias para ambos comicios se acordó en marzo pasado, poco antes de que se iniciará el proceso de registro de candidaturas, previsto originalmente para los primeros días de abril. Una vez que se hubiese superado ese proceso por parte de la autoridad electoral, el sábado anterior debieron comenzar las campañas políticas que se prolongarían 40 días –en ambas entidades– para concluir el 3 de junio.

Si la Secretaría de Salud proyectó como fecha tentativa para reanudar actividades el 1º de junio, aunque las autoridades electorales no han anunciado una prórroga, los dos meses de retraso implicarían que los comicios pudieran efectuarse los primeros días de junio, con la salvedad de nuevas definiciones en materia de campañas electorales, por las concentraciones públicas.

Extender en principio dos meses complicaría el desahogo de procedimientos legales poselectorales en Hidalgo, pues se limitaría a menos de 30 días sus resoluciones por parte de los tribunales locales y el federal, a efectuarse en agosto.