Hacinamiento y falta de servicios
Autoridades han hecho caso omiso a sus demandas
Viernes 17 de abril de 2020, p. 35
Para las familias que habitan el predio Mixica de Santa Inés, en Xochimilco, las recomendaciones de higiene para evitar contagios de Covid-19 son imposibles de cumplir. A la falta de agua se suman el vivir hacinados en cuartos y compartir todos los espacios, y nadie habla de mantener la sana distancia que tanto se anuncia por radio y televisión.
La carencia del líquido no es reciente, la padecen desde hace 11 años. Se bañan cuando es necesario o cuando pueden, la ropa la lavan en tinas, cocinan con agua de garrafón y sólo antes de comer procuran lavarse las manos, comentaron.
La única forma de abastecerse de agua potable, porque carecen de infraestructura hidráulica, es por medio de una conexión doméstica de mangueras, que cada familia improvisó, para extraer agua de la red de tuberías que pasan debajo del predio para los poblados de Xochimilco.
Sin embargo, desde hace varios días el agua ya no les llegó. Las más de 300 personas que habitan el predio relataron que ahora, por medio de mangueras, se dotan del líquido sólo los fines de semana.
En las tuberías sólo pasa el agua los sábados y los domingos y aprovechamos para llenar cisternas, tambos y cubetas, pero últimamente no han abierto las llaves
, señalaron los afectados.
Israel Tadeo, habitante del predio, señaló que ante la contingencia sanitaria que se vive en la ciudad su situación ha sido más complicada porque varios integrantes de las familias que eran choferes, vendían flores o trabajaban de meseros perdieron sus empleos y comprar una pipa de agua, que anda entre 600 a mil pesos, les resulta incosteable porque tampoco tenemos dinero
.
Manifestó que pidieron el apoyo a la alcaldía de Xochimilco y nos dijeron que se comunicarían con nosotros. También al Sistema de Aguas de la Ciudad de México, pero dicen que no tienen pipas
.
Han sido insistentes en solicitar el agua y, pese a la entrega de folios que les han dado como comprobante y registro de la petición, el agua no les ha llegado.
Ante la desesperación, las familias enviaron una carta a la Organización de las Naciones Unidas en busca de ayuda humanitaria e hicieron un llamado a la jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, así como al presidente Andrés Manuel López Obrador, para que se pueda garantizar su derecho humano al agua potable ante la pandemia.