París. El Museo del Louvre, una de las instituciones culturales de esta capital, finalizó ayer la restauración del cuadro La bella jardinera, del pintor renacentista Rafael, que no podrá ser visitado debido a la epidemia de Covid-19.

Tras seis meses de arduos trabajos de conservación, la obra deberá esperar a que los visitantes puedan regresar al museo, cerrado en la actualidad debido al decreto de confinamiento por la enfermedad, y ser contemplada junto a las otras 10 pinturas del maestro italiano con las que cuenta el Louvre.

El cuadro, pintado en Florencia entre 1505 y 1508, es una composición piramidal típica de las Madonnas de Rafael, donde la virgen aparece en medio de un paisaje con el niño Jesús y el joven san Juan Bautista.

A pesar del buen estado en el que se encontraba, los restauradores debieron levantar varias capas de barniz, oxidadas por el paso del tiempo, lo que permitió redescubrir la sutil forma de la piel, el hermoso contraste de colores y el lejano azulado del paisaje de inspiración flamenca.

El Louvre también recuperó en la cuarentena tres dibujos y dos de las pinturas más hermosas de Rafael, el Retrato de Baldassare Castiglione (1514-1515) y el Autorretrato con un amigo (1520), que estaban en Roma para una gran exposición del artista, que debió durar hasta junio. Sin embargo, el comienzo de la epidemia de Covid-19 forzó la cancelación de la muestra tres días después de inaugurarse a principios de marzo, y las obras fueron devueltas al museo de París.