Más allá de las peticiones aisladas y la presión política que se ejerce por la pandemia del coronavirus para la suspensión o aplazamiento de los Juegos Olímpicos de Tokio, el Comité Olímpico Internacional (COI) se ha manejado con mucha claridad acatando las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud y será en mayo cuando tome la decisión de si se harán en 2020 o se realizan el siguiente año, manifiesta Daniel Aceves Villagrán, uno de los dos mexicanos que serán parte de los relevos de la antorcha en la ciudad de Hiroshima.

El subcampeón olímpico de lucha grecorromana en Los Ángeles 1984 externa que todas las voces deben ser escuchadas y habrá que esperar en las siguientes semanas si se lleva a cabo la edición (32) en las fechas pactadas para que sea un mensaje global de aliento a la humanidad frente a las circunstancias que se han dado por la pandemia del Covid-19 en el mundo.

Aceves, presidente de Medallistas Olímpicos de México, descarta que se produzca un boicot político por los intereses que maneja Estados Unidos; el COI no puede permitir ese tipo de presiones y hoy tiene que dar la cara por encima de otros intereses de personas como Donald Trump.

Evoca que el movimiento olímpico se ha visto afectado en los Juegos, como ocurrió en las Guerras Mundiales (Berlín 1916 y Tokio 1940), los atentados terroristas (Munich 1972 y Atlanta 1996), y los boicots (Moscú 1980 y Los Ángeles 1984), además del virus Zika, que puso en tensión la cita de Río de Janeiro 2016 y se realizó sin problemas atendiendo las medidas sanitarias.

Sin embargo, la sombra resurge de nuevo y Daniel Aceves lo admite sin pesadumbre, ya que el entorno ha afectado la preparación de todos los deportistas ante las cancelaciones de torneos clasificatorios olímpicos, fogueo y campamentos; es equiparable y no hay ventaja porque se tenían competencias cercanas a los Juegos, programados del 24 de julio al 9 de agosto, así como los Paralímpicos, a efectuarse en ese último mes y septiembre.

Aceves tiene previsto viajar el 15 de mayo a Japón y cuatro días después portar la llama de la que también será relevo Paola Longoria, quien pugna por el ingreso del raquetbol al programa oficial olímpico.

Afirma que cada “10 días recibe la confirmación del comité organizador de los relevos de la antorcha, se van a recorrer 47 prefecturas y 500 municipios. Nos dan los horarios y rutas (del recorrido que comenzará esta semana) y será sin público.

El exhorto a la humanidad por parte del COI es que se necesita más que nunca un mensaje de resiliencia para que haya confianza entre todos ante un espectro que no sólo afectará la salud, sino que habrá una crisis global económica.