Nueva York. Al menos dos empleados que trabajan en recintos de Estados Unidos para migrantes detenidos –uno en una prisión para adultos y otro en un refugio para niños– han dado positivo al coronavirus, generando preocupación sobre la potencial propagación de la enfermedad en centros de detención de hacinados.

Un miembro del personal médico administrativo en el centro de detención del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por su sigla en inglés) en Elizabeth, Nueva Jersey, dio positivo a Covid-19, la enfermedad respiratoria provocada por el nuevo coronavirus, y actualmente está recibiendo tratamiento, dijo la portavoz del ICE, Danielle Bennett, en un comunicado.

El ICE informó que la persona, que no fue identificada, tenía un empleo que generalmente no involucraba contacto directo con los detenidos, sin entregar más detalles.

La agencia ha dicho que ninguno de los cerca de 38 mil 500 migrantes bajo custodia en más de 200 instalaciones en Estados Unidos ha dado positivo a la enfermedad, altamente contagiosa. Pero el ICE no entregó una actualización de cuántos detenidos habían sido sometidos a exámenes o aislados con síntomas sospechosos.

En Aurora, Colorado, 10 detenidos fueron puestos en cuarentena para observación después de reportes de posible exposición al Covid-19, pero ninguno ha dado positivo hasta la fecha, indicó el ICE.

Por separado, cerca de 3 mil 600 niños migrantes que entraron solos al país o fueron separados de adultos en la frontera entre Estados Unidos y México permanecen bajo custodia de la Oficina de Reasentamiento de Refugiados (ORR, por su sigla en inglés).

Un portavoz del Departamento de Salud y Servicios Sociales de Estados Unidos, que supervisa a la ORR, señaló que un miembro del personal en una instalación que aloja a niños en Nueva York dio positivo al Covid-19 y que todas las admisiones fueron detenidas. El portavoz no dio el nombre de la instalación.

Además, la ORR comunicó que detuvo las ubicaciones de menores no acompañados en California y el estado de Washington, ambos duramente golpeados por el virus, agregando que hasta el 19 de marzo no había confirmado casos entre los niños bajo custodia. Sólo cuatro niños han sido examinados, dos pruebas están pendientes y otras dos dieron negativo, agregó.

Abogados de migración en todo el país han presentado una serie de peticiones de libertad condicional ante el ICE y los tribunales que buscan la liberación de detenidos que, según dicen, son particularmente vulnerables a la propagación de enfermedades en centros de detención hacinados.