Lunes 16 de marzo de 2020, p. 9
Durante 2019 la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) reclutó 28 mil 467 nuevos efectivos, la mayor cifra registrada en los pasados 14 años, según un informe de la propia dependencia en respuesta a una solicitud de información pública.
Durante el gobierno de Felipe Calderón Hinojosa, la Sedena reclutó 98 mil 523 nuevos integrantes, mientras en el de Enrique Peña Nieto esta cifra fue de 86 mil 21.
El gobierno de Andrés Manuel López Obrador recibió las fuerzas armadas con alrededor de 336 mil efectivos y durante su primer año de gobierno aumentó 8.33 por ciento.
Según un seguimiento que el Banco Mundial hace sobre el número de efectivos militares de todos los países del orbe, en el caso de México el mayor crecimiento en este rubro se dio durante el gobierno de Vicente Fox, que empezó con 203 mil integrantes y concluyó con 280 mil.
Calderón continuó con esa tendencia y terminó su gobierno con 329 mil efectivos militares. Esto corresponde con las cifras hechas públicas por la Sedena, que muestran a 2006 como el año que registró un mayor crecimiento en el número de reclutados, con un total de 29 mil 282. El documento difundido por el Ejército no reporta las cantidades de años anteriores.
La cifra más reciente reportada por la Sedena corresponde a enero de 2020, cuando reclutó a 3 mil 318 nuevos militares. Este número representa una marca mensual, pues durante el sexenio de Calderón se incorporaron al Ejército un promedio de mil 368 personas cada mes y en el de Peña Nieto mil 194.
Este incremento notable en el número de reclutados por la Sedena se explica en buena medida por la responsabilidad que tiene para contratar a la plantilla de la Guardia Nacional (GN).
Durante el año pasado, 14 mil 833 soldados pasaron a formar parte de la GN. En esta primera etapa la mayoría eran militares de carrera, que son los primeros mandos medios y superiores de la nueva corporación.
Para este año, otros 14 mil 430 militares, la mayoría recién reclutados y capacitados en la Sedena, se incorporarán también a la GN. Este programa concluirá hasta 2021, cuando los últimos 14 mil 400 efectivos del Ejército pasarán a integrar esa corporación.
En cuanto a las deserciones, la Sedena ha hecho públicas cifras desde 2013 que reportaron un pico de 2 mil 22 personas que abandonaron las filas militares; en 2018 fueron mil 319 y en 2019 fueron 623.
Para cumplir con su meta de reclutamiento, la Sedena flexibilizó algunos requisitos de ingreso. En marzo del año pasado modificó el artículo 21 del Reglamento de Reclutamiento de Personal para el Ejército y Fuerza Aérea en el que se elimina la prohibición expresa de admitir a personas con tatuajes.
Ya se admiten aspirantes con esas características, pero no deben rebasar 10 por ciento de superficie corporal, estar situados en zonas de la piel que queden ocultas con el uniforme completo y no contener textos ofensivos o con apología del delito.