Zacatecas, Zac., Pedro Martínez Arteaga, dirigente del Sindicato de Personal Académico de la Universidad Autónoma de Zacatecas (Spauaz), aseveró que el rector Antonio Guzmán Fernández negoció con los gobiernos federal y estatal la modificación del contrato colectivo de trabajo (CCT), aún no firmado con el organismo gremial, a cambio de recursos extraordinarios que han ayudado a la máxima casa de estudios del estado a hacer frente a su crisis financiera.

El rector y su administración arguyen que se nos pagaron salarios y algunas prestaciones de fin de año con recursos extraordinarios otorgados por la Federación. Seríamos ingenuos si asumimos que dicho pago es a cambio de nada, pues el monto proporcionado a la Universidad Autónoma de Zacatecas (UAZ) fue condicionado por la Federación, el gobierno estatal y el rector, y éste suscribió el compromiso de modificar el CCT de la UAZ sin la anuencia de los sindicalizados, acusó.

Explicó que se busca ajustar las prestaciones al presupuesto autorizado, además de congelar e incluso desaparecer plazas vacantes definitivas, así como adecuar la brecha entre plazas autorizadas y ejercidas, que tienen su origen en el convenio financiero suscrito por el rector en 2016, cuando llegó al cargo, el cual dejará este año.

Martínez Arteaga mencionó que los problemas financieros se han agudizado en los últimos años por la creciente burocracia de la UAZ, que anualmente cuesta 200 millones de pesos, casi ciento por ciento más que hace cinco años.

Es paradójico que (el rector Antonio Guzmán) pida a los trabajadores sacrificar su aumento salarial mientras la rectoría gasta 200 millones de pesos al año en salarios y prestaciones de 360 funcionarios, planteó.

La crítica del dirigente del Spauaz ocurre luego de que el comité de huelga de la máxima casa de estudios decidió posponer del 20 de febrero al 5 de marzo el emplazamiento a huelga por incumplimiento del CCT y desconocimiento de las condiciones para firmar el nuevo convenio de relaciones laborales para el año en curso.

En entrevista Pedro Martínez Arteaga puntualizó que la UAZ vive una crisis económica permanente por mala administración, despilfarro, malos manejos y la corrupción de algunos rectores.

Su situación financiera, subrayó, ha tocado fondo, pues requiere 2 mil 400 millones de pesos para garantizar su viabilidad; sin embargo el gobierno federal sólo autorizó mil 940 millones para 2020.

Refirió que el actual emplazamiento a huelga a la UAZ se sustenta principalmente en las violaciones e incumplimiento en la contratación colectiva y por revisión salarial. Además, advirtió en respuesta a versiones extraoficiales que nunca se ha contemplado modificación alguna al CCT.