Analistas consultados por el Banco de México redujeron de 1.1 a uno por ciento la previsión de crecimiento para este año. Consideraron que la inseguridad pública, la incertidumbre política interna y la relacionada con la situación económica son los tres principales factores que puedan frenar el avance de la actividad productiva.

El pronóstico para la inflación general de 2020 fue ajustado al alza, de 3.4 a 3.5 por ciento en términos analizados, con lo cual alcanzaría el mismo nivel que el esperado para la inflación subyacente al cierre del año, según los resultados de la encuesta mensual del banco central.

Las expectativas para la tasa de interés de referencia del banco para 2020 se mantuvieron sin cambio respecto de diciembre. Se considera que ésta cerrará el año en 6.5 por ciento, descontando un nuevo recorte en la reunión del jueves de la siguiente semana y otros dos movimientos en el segundo y tercer trimestres del año.