Sábado 28 de diciembre de 2019, p. 17
Jerusalén. Legitimado como líder de la derecha israelí tras las primarias de su partido, el Likud, el primer ministro, Benjamin Netanyahu, se dijo ayer listo para empezar una nueva campaña electoral, de cara a las legislativas del 2 de marzo, pese a estar imputado por corrupción. Entre sus primeras propuestas anunció un plan para conseguir que Estados Unidos reconozca la soberanía
israelí en los asentamientos judíos en Cisjordania ocupada.