Cuando niño, Rubén García veía emocionado a los pilotos que correrán este domingo la última carrera del serial Nascar Peak en el autódromo Hermanos Rodríguez. Esta vez, Rubén tiene 23 años y conduce un auto; es el rival a vencer por la posición de líder que ocupa en el campeonato, donde incluso sin ganar la última competencia de la temporada podría conquistar el título.

Rubén se emociona con la prueba de hoy, porque sus perseguidores pueden arrebatar el campeonato si hacen una carrera perfecta. Los rivales a vencer, sus antiguos héroes de la pista, son pilotos experimentados y buscarán jugarse todo en el autódromo.

Es una emoción tremenda estar por encima de pilotos con tanta experiencia, relata; varios de ellos ya eran figuras cuando los veía competir y ahora estarán luchando contra mí para quedarse el campeonato; eso le agrega un sabor muy especial a mi experiencia en la carrera final.

El mediodía del sábado, durante las prácticas, Rubén no se sintió desenvuelto como en otras carreras. Terminó en quinto puesto, pero aún esperaba las clasificaciones por la tarde para definir el lugar de salida. Concentrado, pensativo, calculaba las posibilidades de esas dos vueltas que podían definir el resultado de la carrera del domingo. La práctica no fue el que esperaba y culminó en la quinta posición para la salida; la pole position la conquistó Salvador de Alba.

Mi equipo y yo fuimos constantes durante todo el serial, por eso estamos de líderes, comenta Rubén; pero no puedo sentirme campeón antes de correr el domingo, porque eso puede afectarme. Todos los pilotos salen a hacer la mejor carrera de toda la temporada.

No sólo por los 48 puntos disponibles en la última carrera, que a pesar de ser líder con 458, Rubén está al alcance de sus perseguidores, quienes también podrían hacerse del título. Salvador de Alba (428), Abraham Calderón (424), Irvin Vences (420), Rubén Rovelo (418) y Jorge Goeters (417), tienen posibilidades reales de arruinar toda una temporada a García.

Trato de estar concentrado, de pensar que voy a hacer la mejor carrera de la temporada, planea Rubén; y olvidarme de que estoy en la cima, porque este domingo está en juego toda la temporada.

Además, todos los equipos y patrocinadores estarán presentes en la carrera, será la última oportunidad para muchos pilotos para firmar contratos o establecer alianzas. Eso los convierte potencialmente peligrosos para las aspiraciones del líder del campeonato.

Algunos pilotos se juegan aquí no sólo la temporada que termina, explica; sino quizás la campaña del próximo año, así que salen a dejar todo en la pista. Por eso no puedo relajarme.