Con el fin de eliminar toda forma de clientelismo, de corporativismo a la mexicana en la educación superior, en el próximo periodo ordinario de sesiones el Congreso de la Unión someterá a debate, y en su caso aprobación, una nueva Ley General de Educación Superior (LGES), afirmó en entrevista Luciano Concheiro Bórquez, subsecretario de Educación Superior. Destacó que otro compromiso es eliminar el cobro de cuotas de inscripción en ese nivel educativo.

Tras participar en el Foro de consulta del anteproyecto de LGES, señaló: no queremos estructuras corporativas, sino que las comunidades de educación superior en forma directa construyan un sentido de autoridad en el que participen los distintos sectores. Sobre la obligatoriedad y gratuidad en ese nivel educativo calificó de positiva la creación del fondo especial para cumplir con ambos mandatos constitucionales –tendrá 350 millones de pesos el año próximo–, cuya consolidación, dijo, será gradual.

“Lo importante es que arrancó este año y el compromiso es que en este sexenio toda la educación sea gratuita en términos de cuotas (…) es un mandato de ley y tenemos que cumplir”. Agregó que para algunas casas de estudio ese cobro puede ir de 15 a 20 por ciento de sus recursos, pero en otras sólo representa de 2 a 3 por ciento de sus ingresos, por lo que la aplicación de la gratuidad no sólo es un tema de recursos, sino de derecho humano.

En cuanto a un nuevo régimen político para el sector, enfatizó que no se trata de crear un gran órgano de gobierno, sino uno muy operativo, de construcción de estrategias y de seguimiento de las mismas.

Por ello, señaló, se busca que el proyecto de LGES llegue al Congreso con el mayor consenso posible de la comunidad universitaria, y cuyo debate en foros estatales se extenderá hasta el 15 de diciembre.

Sobre las universidades en crisis, Concheiro Bórquez afirmó que se deben revisar sus sistemas de pensiones y jubilaciones, pero también su acceso, bajo ciertas condiciones, a prebendas que son impagables y que fueron creciendo. Además, rechazó que continúe la herencia de plazas académicas y administrativas en algunas universidades, que se destine personal académico a labores sindicales y en algunas casas de estudio exista más personal administrativo que docente.

En el foro, convocado por la Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior y las secretarias de Educación Pública federal y de Educación, Ciencia e Innovación de la Ciudad de México, Roberto Rodríguez, profesor del Instituto de Investigaciones Sociales de la Universidad Nacional Autónoma de México, detalló que un tema central del anteproyecto es la definición de una nueva gobernanza para el sector.