Al anunciar la integración de un equipo especial de investigación para el caso LeBarón, el presidente Andrés Manuel López Obrador señaló que no se descarta ninguna hipótesis.

Ante las versiones de familiares de las víctimas que aseguran que el asesinato de tres mujeres y seis niños no fue una confusión, sino un acto intencional de grupos criminales, el mandatario puntualizó que se están manejando todas las hipótesis, todas; no se descarta nada.

Para este y otros episodios, comentó el Presidente, las fuerzas armadas y la Guardia Nacional (GN) tienen la capacidad técnica, operativa y de inteligencia necesarias para hacer frente a los criminales, por lo que el diálogo o negociación con estos grupos no es opción.

Lo que se quiere es que (los criminales) no tengan bases sociales, comentó a pregunta específica sobre esa posibilidad, como vía para atajar la violencia.

En cambio refrendó la estrategia de seguridad de su gobierno, de no a la guerra, actuar conforme a principios, sin balandronadas e investigar sin ningún límite o atadura.

En comentarios de política exterior, dejó en claro que no lograrán confrontarlo con el presidente Donald Trump, de quien reconoció de nueva cuenta mantener frente a México una actitud respetuosa, al ofrecer ayuda en función de lo que nosotros determinemos. Ante las propuestas de legisladores estadunidenses para que la acción de los narcotraficantes se considere terrorismo o se permita el ingreso de ayuda de esa nación, el Presidente López Obrador dijo: Van a haber quienes quieran buscar que nos confrontemos. No lo van a lograr. Para que haya pleito cuando menos se necesitan dos; uno solo no puede pelearse o buscar pleito, respondió en conferencia de prensa.

El mandatario señaló que las fuerzas armadas realizan su trabajo de manera profesional, por lo que no debe pensarse que estamos desprovistos de elementos para hacer justicia.

Sin embargo, no descartó revisar la distribución de la GN, la cual se hizo a partir los niveles de violencia (actualmente tiene 75 mil elementos, adscritos a 150 coordinaciones), aunque aseguró que la violencia está focalizada.

Hay días en que en la mitad de las entidades no hay homicidios, aseguró.

También dijo que hay estados de alta producción de droga en donde, a pesar de ello, no hay incidencia superior de crímenes dolosos, pero en determinados lapsos, casi tres cuartas partes de la incidencia delictiva se concentra en 5 u 8 estados.

Un día vamos a presentar esto porque con estos hechos lamentables se puede pensar que así está todo el país; afortunadamente no es así, está muy focalizada la violencia de este tipo de homicidios, aseguró.

También respaldó al secretario de Seguridad Alfonso Durazo.

Un reportero le planteó que si habría algún cambio porque, comentó, se ve al funcionario cabizbajo, minado.

El presidente respondió: “Yo veo bien a Alfonso Durazo, fortachón, con ánimo…A lo mejor (se ve) cabizbajo por levantarse todos los días a las 4:30 de la mañana…”.

Señaló entonces que su equipo trabaja bien, de manera coordinada, con la moral en alto, fuerza de voluntad y aplomo.

Lo que sí nos hubiera tumbado, confió el mandatario, habría sido no abortar el operativo en Culiacán –en el que se detuvo sólo por algunas horas al hijo de El Chapo Guzmán– y, por tanto, no haber evitado una masacre.