La policía de la Ciudad de México está para proteger, servir y estar del lado de la ciudadanía, no para reprimir, afirmó el secretario de Seguridad Ciudadana, Jesús Orta Martínez, en clara advertencia a los uniformados de que aquel que vaya en contra de la norma no puede estar en la corporación.

A pesar de que algunos uniformados han sido agredidos durante operativos de tránsito o del programa Conduce sin Alcohol, el funcionario aseguró que la misión de la policía es proteger y servir a los habitantes de la capital, lo que es parte fundamental para lograr la paz en esta ciudad.

En su discurso al participar en el Festival de la Paz, el jefe de la policía capitalina insistió en que los policías están para trabajar junto con los habitantes de la ciudad para sacar las armas de los hogares, comercios, escuelas y de todos los lugares donde no deben estar.

En el Monumento a la Revolución, Orta mencionó que alcanzar la paz es el corazón y objetivo último de la estrategia de seguridad del gobierno capitalino, de la que parte importante es el resultado del programa Sí al desarme, sí a la paz, que impulsa la secretaria de Gobierno, Rosa Icela Rodríguez.

Del 21 de enero de este año al 25 de septiembre pasado se destruyeron 4 mil 100 armas, por lo que Orta dijo que se trata de un programa muy exitoso en el que participan las 16 alcaldías, los poderes Legislativo y Judicial y la Secretaría de la Defensa Nacional, con lo que de esa manera todos juntos hacemos un frente promotor que ha logrado este resultado, que es único en el país.

El funcionario hizo referencia a todas las instancias porque los ciudadanos que acuden a entregar armas o cartuchos a los lugares públicos fijados por la Secretaría de Gobierno local lo hacen de manera voluntaria, no son investigados por ninguna autoridad ni sancionados, además de que reciben un beneficio económico que fija la Secretaría de la Defensa Nacional.

Las 4 mil 100 armas recolectadas a la fecha en conjunto pesan más de una tonelada de material ferroso.