Guadalajara, Jal., Al menos 170 docentes wixaritari de los municipios de Mezquitic y Bolaños, ubicados en el norte de Jalisco, tomaron las oficinas de la delegación regional de la Secretaría de Educación estatal en Colotlán y anunciaron que ellos y otros maestros permanecerán en las instalaciones hasta que se presenten a dialogar con ellos el titular de la dependencia, Juan Carlos Flores, y el secretario de la sección 16 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), Elpidio Yáñez.

La movilización es parte de las protestas no sólo de maestros, sino también de los gobiernos tradicionales y comunales de Tuapurie (Santa Catarina Cuexcomatitlán) y Wauta-Kurixi Manuwe (San Sebastián Teponahuaxtlán y su anexo Tuxpan de Bolaños), que desde febrero pasado piden al gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro, y a Juan Carlos Flores mejoras en escuelas, así como que se les entreguen mochilas, útiles y zapatos.

Los mentores también demandan estabilidad laboral y la destitución del director de Educación Indígena estatal, Juventino Bautista.

Los inconformes, adscritos a las zonas escolares 1, 4 y 6, dejaron sin clases a decenas de planteles con alumnos wixaritari de educación inicial, prescolar y primaria en los municipios de Mezquitic, Bolaños y Huejuquilla el Alto, que se hallan en la sierra norte del estado.

El lunes se incorporaron a la manifestación profesores de Tuapurie y Wauta-Kuruxi Manuwe, al igual que de otros asentamientos wixaritari como Ocota de la Sierra, Mesa del Tirador, Pueblo Nuevo y Nueva Colonia.

El plantón se inició con un paro laboral y una marcha el lunes, y las protestas continúan porque ni el secretario Flores ni el dirigente de la sección sindical Yáñez se han presentado, como exigen los docentes indígenas, pese a que el secretario de Educación declaró el martes en Guadalajara que envió comisionados a Colotlán para dialogar con los manifestantes, lo que éstos desmintieron.

El próximo jueves vencerá el plazo impuesto por los wixaritari al gobernador Alfaro para que acuda a Tuapurie a dar la cara y conocer de viva voz los reclamos de la comunidad, que incluyen obras de infraestructura y apoyos sociales, según un pliego petitorio que el mandatario tiene en su poder desde hace meses.

Los inconformes advirtieron que pretenden realizar más acciones de resistencia para poner en evidencia lo que llamaron menosprecio hacia sus causas, en caso de que Alfaro no acuda a la cita.