La policía no intervino
elecciones limpias
Líderes opositores y ciudadanos realizaron plantones en silencio con carteles reivindicativos
Domingo 18 de agosto de 2019, p. 20
Moscú. Por quinto sábado consecutivo, la capital rusa devino escenario para exigir elecciones limpias y la libertad de los opositores encarcelados por protestas anteriores, pero esta vez la policía –apoyada siempre por unidades antidisturbios y soldados miembros de la Guardia Nacional, a la espera de recibir la orden de actuar desde calles aledañas del centro de Moscú– se limitó a observar a los inconformes.
Confiados en obtener la autorización para un mitin multitudinario de hasta 100 mil personas el sábado 24 de agosto, los opositores en esta ocasión llevaron a cabo plantones individuales con carteles reivindicativos que no requieren permiso, de acuerdo con la ley vigente, siempre y cuando se sitúen a no menos de 50 metros de distancia.
Durante varias horas, en lugares emblemáticos del centro de la capital rusa opositores de renombre y simples ciudadanos realizaron los plantones en silencio, rodeados de periodistas y policías, siendo remplazados por otro descontento al cabo de un tiempo con un nuevo cartel de protesta.
Es difícil saber cuántas personas participaron en los plantones de este sábado. En los tres sitios en que los convocantes –los diputados municipales Yelena Filina, Ilia Azar y Andrei Moriev– sugirieron hacer los plantones, se inscribieron 80 personas y 351 dijeron estar dispuestas a tomar el relevo. Al término de la jornada, se supo que en otros lugares también hubo actos individuales.
No se tuvo noticia de incidentes graves ni de detenciones violentas, salvo la de Dimitri Baturo, líder de un grupo de adolescentes que, cuando ya habían concluido los plantones, hacia las cinco de la tarde, decidió marchar por la calle peatonal de Arbat coreando consignas contra el Kremlin. En el momento en que se disponían a dar vuelta para seguir su protesta sobre la misma calle, la policía arremetió contra ellos y detuvo a Baturo.
La alcaldía de Moscú denegó a la oposición extraparlamentaria el permiso para un mitin este sábado en la avenida Sajarov porque ya había autorizado ahí un mitin del Partido Comunista de Rusia, oposición nominal y leal aliado a la hora de votar en el Parlamento, siempre como conviene al Kremlin en los asuntos más importantes. Asistieron a ese mitin menos de 4 mil personas.