El Paso. El acusado de perpetrar el tiroteo en una tienda Walmart de esta ciudad texana hace el sábado pasado, identificado como Patrick Crusius, confesó al rendirse para ser detenido que su objetivo era atacar a mexicanos, confirmaron ayer autoridades estadunidenses, mientras que el presidente Donald Trump defendió las reformas de sentido común sobre el derecho a portar armas, y afirmó que la Asociación Nacional del Rifle (NRA) debe dar su punto de vista al respecto.

El detective Adrian Garcia afirmó en una declaración jurada sobre una orden de arresto del acusado que Crusius, de 21 años, salió con las manos en alto de un vehículo que estaba estacionado en una intersección poco después del ataque –que dejó 22 muertos, entre ellos ocho mexicanos, y 26 heridos, en su mayoría de origen hispano–y dijo a los agentes: Yo soy el que disparó.

El agresor fue detenido y llevado a la comisaría, donde renunció a sus derechos Miranda (que permite a todo sospechoso de un crimen permanecer en silencio o tener un abogado presente). Posteriormente confesó a las autoridades que entró a la tienda con un fusil de asalto AK-47 y múltiples cargadores, además declaró que su objetivo eran los mexicanos.

Crusius enfrenta cargos por asesinatos múltiples, lo que podría llevarlo a una sentencia a muerte. Según reportes de prensa, que citan a autoridades. Antes de llevar a cabo el ataque el joven publicó en Internet un manifiesto que habla sobre una invasión hispana en Texas.

Horas después de la agresión hubo otro tiroteo mortal en Dayton, Ohio, donde nueve personas murieron. Los dos incidentes dejaron un total de 31 fallecidos y decenas más de heridos, y resurgieron las peticiones al Congreso de que actúe de inmediato para reducir la violencia con armas.

En la Casa Blanca Donald Trump dijo que podrían tomarse medidas de sentido común para enfrentar los hechos de violencia por tiroteos en el país, pero añadió que desea tener la perspectiva de la Asociación Nacional del Rifle (NRA, por sis siglas en inglés).

El mandatario dijo que el país requiere revisión de antecedentes eficientes para que las personas enfermas no obtengan armas. Agregó: Francamente, necesitamos chequeos de antecedentes inteligentes. No es un tema de la NRA, o republicano o demócrata.

El año pasado, el poderoso grupo presionó al mandatario republicano a retirar su apoyo a un proyecto de ley que restringía el acceso a armas, a pesar de la indignación nacional causada por un tiroteo en una escuela secundaria de Parkland, Florida, donde murieron 17 personas.

Manifestantes, demócratas y residentes han criticado a Trump por sus palabras provocadoras y lo han culpado de las tensiones raciales en el país. El presidente niega que haya provocado división y violencia, y esta semana afirmó que él une a las personas. A nuestro país le va increíblemente bien.

El magnate arremetió también contra Hollywood por sus películas racistas, en referencia a la polémica desatada por The Hunt, cuya promoción fue suspendida.

Pánico en Misuri

A cinco días de las matanzas en Texas y Ohio, cientos de personas que se encontraban en un Walmart de Springfield, Misuri, huyeron atemorizados cuando vieron a Dmitriy Andreychenko con un fusil, 100 rondas de municiones, chaleco antibalas y traje militar, reportaron autoridades locales.

La policía de Springfield informó en un comunicado que Andreychenko fue acusado de amenaza terrorista tras ser detenido por un bombero. En este momento, la investigación está en marcha y estamos trabajando para determinar sus motivos, explicó.

En otro caso, Conor Climo, residente de Las Vegas, fue detenido por la Oficina Federal de Investigaciones (FBI, por sus siglas en ingles) bajo la sospecha de que planeaba atacar una sinagoga y un bar de la comunidad LGBT, y de que poseía los elementos para fabricar una bomba, reportó la cadena NBC News.

Elementos de la FBI indicaron que Climnot, de 23 años, confesó que planeaba movilizar a otras ocho personas para atacar una sinagoga y mantiene contacto con supremacistas blancos en Internet, detalla la nota periodística.

En tanto, Walmart pidió a sus tiendas en Estados Unidos que retiren los carteles y muestras de videojuegos que incluyan imágenes o mensajes alusivos a la violencia con armas, aunque no ha hecho cambios en su política de vender armas.