En tiempos de austeridad
Es juez y parte, porque a ese órgano toca revisar la queja
Viernes 9 de agosto de 2019, p. 4
En la asignación de un contrato otorgado por el Consejo de la Judicatura Federal (CJF) para sus servicios de impresión, digitalización y fotocopiado hubo un proceso amañado
, ya que las empresas ganadoras ofrecieron una cotización mil millones de pesos más alta que la de uno de sus competidores, además de que varias compañías participantes fueron descalificadas de manera indebida.
Así lo indicó una fuente cercana al proceso, quien lamentó que los encargados de recibir y analizar las posibles quejas son los mismos funcionarios que decidieron a quién asignar el contrato de cuatro años de duración, que tiene un valor total de 4 mil 188 millones de pesos, lo que lo convierte en el más alto de la historia del Poder Judicial.
A condición de mantener el anonimato, el denunciante explicó que el contrato implica abastecer al CJF en materia de impresoras, fotocopiadoras, escáneres, papel y todos los insumos relacionados con la impresión de documentos, lo que representará un total de más de 21 mil equipos instalados en más de 850 tribunales y juzgados de todo el país.
En el fallo dado a conocer el pasado 12 de julio –del cual este diario posee una copia– se establece que la ganadora del concurso es la compañía japonesa Sharp y Distri Copy, su distribuidora en México, en el contexto de un contrato que por vez primera se otorgó de forma multianual.
De acuerdo con el denunciante, una de las principales irregularidades del concurso es que el contrato le fue concedido a unas empresas que no garantizaban el mejor precio, ya que una de las competidoras ofreció abastecer el equipo en cuestión en 3 mil 150 millones de pesos, poco más de mil millones menos que las compañías ganadoras.
Asimismo, aseguró que muchos competidores fueron descalificados de manera indebida, ya que no contaban con equipos especiales que –a decir de él– sólo pudieron haber tenido las proveedoras que supieran de antemano que se les iba a solicitar ese tipo de impresoras, plotters y fotocopiadoras.
El resultado de ello, afirmó, es que de los 48 aspirantes inscritos, sólo cinco lograron registrar sus propuestas, pero cuatro de ellos fueron descalificados.
Por otro lado, el declarante lamentó que el equipo de funcionarios que tomó la decisión de otorgar el contrato a Sharp-Distri Copy –pertenecientes a la Secretaría Ejecutiva de Administración del CJF– es el mismo que se encargaría de analizar las eventuales quejas, por lo que funge como juez y parte.
Este diario contactó al CJF para pedirle un posicionamiento con respecto al tema, pero hasta el momento no ha recibido respuesta.