También busca inspeccionar los 120 mil camiones en que la hortaliza entra a ese país
Sábado 3 de agosto de 2019, p. 16
Productores de tomate rojo o jitomate denunciaron que el Departamento de Comercio de Estados Unidos pretende aumentar la cuota compensatoria para ese artículo de 17.5 a 25.28 por ciento, además de que busca inspeccionar los 120 mil camiones que cruzan al año la frontera para llevar esa hortaliza al vecino país del norte.
De acuerdo con el resultado preliminar de la investigación que realiza el organismo del gobierno estadunidense –reactivada el pasado 7 de mayo–, existen prácticas desleales en la venta de ese producto mexicano, pues su precio estaría por debajo del costo real. Por ello, el Departamento de Comercio estaría evaluando, de acuerdo con las metodologías aplicadas, que la cuota compensatoria contra el jitomate pase a 25.28 por ciento, mayor al 17.5 fijado en 1996.
Mario Robles, director de la división de hortalizas de la Confederación de Asociaciones Agrícolas del Estado de Sinaloa (Caades), explicó que en condiciones normales y con metodologías tradicionales, el margen en las tres empresas investigadas debió ser de cero o muy cercano a esa cifra, pero el Departamento de Comercio usó un método para bienes duraderos, no perecederos, por lo cual determinó aplicar un procedimiento diferente a cada investigado, y en un caso en particular empleó una combinación de ellos para llegar a un margen de dumping mayor.
Aunado a ello, tanto Caades como la Asociación Mexicana de Horticultura Protegida, el Consejo Agrícola de Baja California, el Sistema Producto Tomate Nacional y la Asociación de Productores de Hortalizas del Yaqui-Mayo denunciaron que el gobierno estadunidense busca inspeccionar por calidad, en un plazo de hasta 72 horas, cada uno de los transportes terrestres que movilizan el jitomate a ese país.
Robles acotó que no se justifica la aplicación de medidas de verificación a la importación, como sí son necesarios en aspectos fitosanitarios, sanitarios, de residuos tóxicos o de inocuidad, en los cuales ambos gobiernos tienen fuertes lazos de cooperación y buena voluntad.
Robles indicó que el gobierno mexicano ya tiene conocimiento del asunto y que el titular de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural, Víctor Villalobos, ya ha comunicado esto a su homólogo, Sonny Perdue, por lo que de prosperar esas medidas, México podría aplicar regulaciones similares a la importación de alimentos si son pedidas por los productores mexicanos.
Las organizaciones que representan a la industria del tomate, responsables de la negociación para eliminar los aranceles, solicitaron a Villalobos la aplicación de medidas espejo para que se inspeccione la calidad del maíz, trigo, soya, sorgo, lácteos, fructosas, manzanas, peras, uvas, carne de res, puerco y aves.
“Le hemos dicho que ya es tiempo de que se proteja a nuestros productores de granos básicos, se coordinen las dependencias y se inicien investigaciones de subsidios a la importación de granos y cereales de ese país, pues no es un secreto que el gobierno estadunidense otorga enormes subsidios a sus granjeros con el farm bill y otros fondos, en productos que finalmente vienen a parar a México, desplazando y causando daño a la produccion nacional”, apuntó.